Jóvenes bomberas: "No pensás en el peligro"

Hasta hace unos años era raro encontrar una mujer en un cuartel de bomberos, pero ahora cada vez son más las que salen a combatir el fuego, intervenir en un choque o hacer un rescate en altura. "Cuando hay una urgencia no tenemos en cuenta el peligro", afirma Johana
Pasa en el cine y pasa en la vida real. Cuando las grandes catástrofes naturales asolan un determinado lugar surgen imágenes o historias que, como se impone en la era digital y globalizada de hoy, se viralizan en solo minutos. Y en los incendios rurales que azotaron a gran parte de La Pampa y provincias vecinas en el último verano esa foto tuvo como protagonista a Luciana Rizzo, una joven de 23 años que, exhausta por el esfuerzo, cayó dormida sobre el pasto seco de un campo bonaerense en medio del humo y las llamas.
La historia llegó a todos los medios y redes sociales y muchos descubrieron que las mujeres también ocupan esos lugares de máximo esfuerzo frente al peligro y al riesgo de muerte, una tarea voluntaria que cada año suma a adolescentes de toda la provincia con el sueño de ponerse un traje y un casco para ayudar en una situación extrema.
"Desde los 8 años que me llamó la atención. Mi papá es bombero así que me parecía hermoso el trabajo que hacen, es un voluntariado que surge por tus ganas e impulso, nada más. Cuando me dijeron que podía ser cadete, me animé, y a los 13 empecé a estudiar. Son muchas las cosas que hay que saber para ser bombero: el uso de las herramientas, cómo enfrentar un incendio, intervenir en un choque, en un rescate en altura o en un pozo", dice Gisel Oroná (19 años), que integra el cuartel de Bomberos Voluntarios de Bernardo Larroudé y estudia a distancia la carrera de Enfermería que se dicta en General Pico.
Gisel, junto a Johana Vivanco (25) y Ornella Chia (19), fueron tres de las 100 bomberas de la provincia que el 9 de marzo pasado recibieron un homenaje en la Legislatura en el marco del Día Internacional de la Mujer por su labor durante los incendios rurales del verano.
"En mi caso no tengo ningún familiar que sea bombero, pero es algo que me encanta. Quizá no tenemos en cuenta el peligro cuando hay una urgencia, seguramente eso es algo que preocupa más a nuestros familiares que a nosotros. Te sale de adentro, cuando hay un hecho, cuando suena la sirena, dejo todo y salgo, no podés contenerte. Es tanta la adrenalina que no se piensa en la posibilidad de no volver a tu casa", afirmó Johana, de Ataliva Roca, un cuartel que se creó hace poco tiempo y en el que la preponderancia femenina es evidente: siete mujeres (dos de ellas jefas) y tres varones.
A tono con esa tendencia, los números ponen sobre la mesa el cambio cultural: actualmente, más de 7.000 mujeres desempeñan tareas dentro del Servicio Nacional de Bomberos Voluntarios. Ellas representan el 16 por ciento, contra el 9% que eran en 2010 (los hombres son 36 mil, según los datos oficiales a nivel país).
"En el verano estuve en Abramo y la verdad que fue duro, también fui a La Adela, pero ahí el peligro no fue tanto porque era hacer contrafuego. En Abramo sí hubo riesgo porque había fuego por todos lados y era muy difícil de controlar", recordó Ornella, del cuartel de Bomberos de Alpachiri y una de las tantas que intervino en los 200 incendios que dejaron casi 1,3 millones de hectáreas quemadas en La Pampa.
Ornella estudia Ingeniería Química en Bahía Blanca. En su caso la influencia paterna también fue clave para despertar el espíritu solidario. "Yo empecé a los 15. Mi papá es bombero y cuando me acerqué me gustó y seguí. Sos cadete hasta los 18 y después pasás a bombero", detalló sobre la tarea de un cuartel que a inicios de marzo protagonizó el dramático rescate de Yona Pereyra, un joven trabajador de 21 años que quedó atrapado en un silo repleto con tres mil toneladas de trigo. Doce bomberos de Alpachiri palearon cereal sin parar durante cinco horas hasta que le salvaron la vida.
¿Cuál es el aporte distintivo de las mujeres a una tarea que implica máximo riesgo y esfuerzo extremo? Los especialistas destacan sus capacidades para enfrentar la adversidad, como la empatía o la paciencia, también su visión, "mente fría y sentido común" en situaciones donde también hay que apelar a la improvisación.
"El trabajo en equipo es clave, por eso es importante que cada uno haga su aporte, y si hay hombres y mujeres pienso que se aprovecha más. Yo no veo ningún tipo de discriminación, quizás antes sí a las mujeres se las enviaba a tareas administrativas dentro del cuartel, pero hoy hacemos lo mismo, no hay diferencias", apuntó Johana.
¿Qué les generó la foto de la bombera dormida en el suelo?
"La foto me puso mal porque no tenían ayuda y trabajaron sin parar, y evidentemente el cansancio la pudo. Te daban ganas de salir a ayudar, de hacer tu aporte porque a veces no contás con las herramientas necesarias y es muy difícil", dijo Gisel.
"Lo positivo de la foto fue que por ahí sirvió para que mucha gente sepa de la necesidad de ayudar a los bomberos voluntarios, y también para que muchas chicas se animen a acercarse a un cuartel", agregó Ornella.
"Está bueno para que se vea lo que es un bombero y cómo termina agotado", aclaró en su momento Luciana, y enseguida agregó: "No siempre hay tiempo para sacar una foto", respecto a la imagen que capturó su novio, también bombero, en un resumen de una tarea que requiere mucho de eso: de amor, de amor por ayudar.

Por inclusión
e igualdad
#NosotrosPorEllas es el nombre de la campaña que lleva adelante el Programa de Género desde el año 2015 con el objetivo de concientizar sobre la inclusión e igualdad de género dentro del Sistema Nacional de Bomberos Voluntarios. Invitan a los bomberos de todo el país a que se comprometan a emprender acciones contra todas las formas de discriminación y violencia que enfrentan las mujeres, además de apoyar la igualdad de oportunidades dentro de los cuerpos de bomberos. La propuesta consiste en firmar un compromiso en la web de la organización y enviar un breve video contando por qué y cómo se comprometen los hombres a participan de esta acción. Esos mensajes son difundidos en las redes sociales de la institución para lograr una mayor concientización de la temática.