"Estoy a favor de que se investigue"

El opositor Antonio Anastasia, instructor de la comisión del Senado que analiza un pedido de juicio político contra la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, se pronunció ayer a favor de la continuación del proceso parlamentario que pude derivar en la destitución de la mandataria.
La postura de Anastasia supone un segundo golpe para Rousseff en pocas horas, debido a que antes se conoció que el fiscal general Rodrigo Janot pidió que se investigue a la Presidenta a raíz de la denuncia de un senador que la acusa de obstruir a la justicia.
El relator de la comisión especial de juicio político aceptó la denuncia aprobada en Diputados y consideró que hay delito de responsabilidad por violar la ley fiscal en 2015 para destituir a la mandataria, por lo que recomendó que avance el proceso.
El viernes, la comisión del Senado de 21 miembros debe aprobar el informe -está conformada por amplia mayoría de opositores- y el próximo miércoles 11 debe votarse por mayoría simple en el recinto si Rousseff es separada del cargo por 6 meses hasta el veredicto final, que puede incluir la destitución del cargo.
El gobierno considera los delitos, llamados de "pedaleadas fiscales" en el presupuesto, como un argumento para dar un "golpe de Estado" encabezado por el vicepresidente Michel Temer y el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, ambos del Partido del Movimiento de la Democracia Brasileña.
Anastasia es del opositor Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), la misma fuerza que presentó el pedido de impeachment abierto el 3 de diciembre en Diputados por Cunha, luego de que el Partido de los Trabajadores (PT) de Rousseff se negara a defenderlo de las múltiples acusaciones de corrupción en su contra.
En su informe, Anastasia defendió la decisión de Cunha y atribuyó a Rousseff un delito por haber firmado decretos de créditos suplementarios y haber atrasado el pago a los bancos públicos para ejecutar los masivos programas sociales implementados por el PT desde los gobiernos de Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), principal bandera de gestión.
"Están los requisitos exigidos por la ley para que la denuncia responda al proceso de juicio político", escribió el senador Anastasia, ex gobernador de Minas Gerais y delfín del también senador y ex candidato presidencial derrotado por Rousseff en 2014, Aecio Neves.

Rousseff.
En tanto, Rousseff afirmó que son "mentirosas" las acusaciones sobre obstrucción de la justicia hechas por el senador Delcidio Amaral y que provocaron un pedido de investigación contra la jefa del Estado por parte del fiscal general, Rodrigo Janot.
Rousseff, en diálogo con periodistas, dijo que se enteró por la prensa del pedido de investigación hecho por el fiscal y lo vinculó a "intereses inconfesables" de quienes quieren buscar impacto en la decisión del juicio político que se le realiza en el Congreso.
"Ocurrió algo muy grave, la filtración de un proceso en secreto de sumario de la cual tomé conocimiento por la prensa. Es algo extraño, en vísperas del juicio en el Senado. El autor de la filtración tiene intereses inconfesables", dijo Rousseff.
Rousseff dijo que pedirá al Supremo Tribunal Federal investigar la filtración a la prensa del pedido de investigación sobre su accionar relatado por Amaral, ex líder del bloque oficialista en la cámara alta.
"Quiero que se investigue, pero estas operaciones tienen el objetivo de hacer daño, no de buscar la verdad. Repito que estoy a favor de que se investigue a fondo", comentó la mandataria luego de anunciar un plan de incentivos para la actividad agropecuaria.
El senador Amaral "tiene la práctica de mentir y quedó claro en otras acusaciones que hizo".
"La apertura de la investigación demostrará que el senador una vez más faltó a la verdad. No tiene credibilidad y miente", afirmó la mandataria. (Télam)