Creció la cantidad de mujeres argentinas que crían solas a sus hijos

El Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC) publicó un estudio en su sitio web donde analiza los cambios que se produjeron en las composiciones de las familias argentinas durante los últimos 33 años.

 

El trabajo compara y afirma que en 1986 casi una de cada dos familias estaba conformada por madre, padre e hijos/as, pero que en 2018, la proporción de estas “familias nucleares” cayó a menos del 35% del total.

 

La organización explica que este cambio se dio por el avance de la transición demográfica en Argentina, ya que en la década del `80, siete de cada diez familias tenían hijos/as y actualmente esa proporción decreció a seis de cada diez.

 

Antes era más común encontrar hogares que eran sostenidos por un hombre (65% en el año 1986) y ahora esa situación disminuyó a un 35%. En contrapartida, creció la cantidad de familias que son mantenidas por dos personas integrantes, pasando de un 29% a un 40% en el mismo período de tiempo.

 

En tal sentido, CIPPEC asegura que las mujeres se fueron incorporando en mayor medida al mercado de trabajo durante las últimas décadas pero siguen siendo las principales responsables de realizar las tareas hogareñas.

 

En 1986, los hogares con una sola persona adulta representaban el 9% del total pero en la actualidad esa proporción creció hasta representar uno de cada cinco viviendas con esa composición. Asimismo, estos casos, en su mayoría, corresponden a personas de elevada edad que viven solas y poseen una sólida posición socioeconómica.

 

También se incrementaron la cantidad de familias que tienen un solo padre o madre con hijos/as, las cuales pasaron a ser el 12% hace más de 30 años, a ser el 19%. Este tipo de casos son protagonizados fundamentalmente por mujeres que crían solas a sus hijos/as y deben hacerse cargo de trabajar dentro y fuera de su hogar.

 

El estudio reveló que estas transformaciones familiares presentan disparidades según los niveles socioeconómicos de que se trate. Así, los hogares de ingresos más bajos mantuvieron constantes sus patrones reproductivos entre 1986 y 2018, ya que antes un 86% de esas familias tenían hijos y hoy ese porcentaje es del 87%.

 

Por el contrario, los hogares con ingresos económicos más elevados experimentaron un descenso en este ítem: en 1986, el 56% de esos hogares tenían niños/as y en el 2018 esa proporción cayó a 36%.

 

Foto: lagaceta.com.ar