«Hicimos lo mejor que pudimos por él»

En el marco de la investigación por la muerte de Diego Armando Maradona, la Fiscalía General de San Isidro ordenó sendos allanamientos en la casa y el consultorio de Leopoldo Luque e imputó al médico por «homicidio culposo». Unos de los procedimientos ordenados por el juez Orlando Díaz se desarrolló en 30 de Septiembre al 1.800, en Adrogué (zona sur del conurbano), donde el médico entregó todos los elementos que solicitó la fiscalía y fue notificado de la imputación.
El otro allanamiento se desarrolló en su consultorio de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a pedido del fiscal general John Broyad. El equipo de la fiscalía se completa con los fiscales adjuntos Patricio Ferrari y Cosme Iribarren, y la fiscal de Benavídez, Laura Capra.
Al dialogar con la prensa luego de los allanamientos, Leopoldo Luque aseguró que «no hubo un error» de ninguno de los profesionales que trataron al astro futbolístico y aclaró que no se reprocha «nada» a sí mismo porque «se hizo lo mejor que se pudo» para asistirlo. «No hubo un error médico de parte de nadie. Diego tuvo un evento fortuito, un ataque cardíaco de un paciente que ante sus características resulta lo más común del mundo que muera así», aseguró ayer, tras el allanamiento judicial en su vivienda de Adrogué.

«Se hizo lo mejor».
«Lamentablemente es un hecho que podía pasar, antes o después. Se hacía todo lo posible para disminuir la chance pero no para bloquearlo», señaló entre lágrimas. «No me reprocho nada. Estoy orgulloso todo lo que se hizo por Diego. Se hizo lo mejor que se pudo» afirmó». Luque agregó que «amaba a Maradona», a quien consideraba su «paciente preferido», y se declaró «un fanático de Diego. El era como un papá para mí» añadió.
El neurocirujano aseguró que durante el allanamiento secuestraron la historia clínica de Maradona con «anotaciones» suyas y de «otros profesionales que participaron de la atención», de dispositivos electrónicos, discos rígidos y celulares. Luque se mostró «sorprendido» por lo allanamientos en su oficina y domicilio ya que cuando Maradona falleció «estaba la fiscalía trabajando y yo me puse a su disposición».
«Estoy completamente a disposición de la justicia, sé lo que hice y cómo lo hice, con y por Diego hasta el último momento», ratificó. En varios pasajes de la entrevista el médico sostuvo que Diego «era quien decidía todo el tiempo» y que no era un paciente «insano». «Diego era un paciente de alta y todo lo que se puso, como la enfermera, fue con el aval de él», señaló.

El último día.
Consultado sobre las últimas veces que atendió al astro, Luque respondió que lo vio el jueves anterior y que se había peleado «porque no quería ver a nadie», pero que al día siguiente regresó y le quitó los puntos de su operación por un hematoma subdural.
Luque también recordó cuando le avisaron que Maradona no respondía a los estímulos. «Estaba operando, me llaman y me dicen que Diego está mal y no reacciona. Me quedo pensando qué carajo está pasando y llamo a una ambulancia y digo que está en paro». Y añadió: «llamé al jefe de ambulancia de Swiss Medical y le pedí que mandara un helicóptero a la casa de Diego porque parecía haber sucedido algo serio».
También ratificó que Diego «no estaba tomando alcohol» y que «las pastillas que tomaba estaban administradas». «El riesgo de Diego era de consumo (alcohol), no un ataque cardíaco. Si hubiera necesitado un desfibrilador o una ambulancia lo habría internado» sostuvo, y reiteró que su función como profesional «era hacerle entender las cosas a Diego y que él tuviera voluntad (de hacerlas)».
«En algunas reuniones sugirieron tener una ambulancia en la casa pero no sé de quién era la responsabilidad de esa decisión. Era un paciente en condiciones de alta que debía seguir en un centro de rehabilitación pero no tenía voluntad y se logró que tuviera una enfermera» dijo. Y sentenció, tajante: «Diego abandonó la pelea». Contó que en el último tiempo «extrañaba a sus padres» y lo calificó como «una persona muy solitaria».
«Una de sus hermanas me dijo que fui el tipo que más quiso en el último tiempo. Creo que Diego bancó todo esto por mí» resaltó y añadió: «si de algo soy responsable es de amarlo, cuidarlo, extenderle la vida y mejorársela hasta lo último. Se hizo lo que había que hacer y más también. Sé que hay una investigación y me ajusto a derecho. No tengo nada que ocultar, estoy orgulloso de cómo lo traté» concluyó.
(Télam)