Apostasía Colectiva en la plaza

Integrantes de diversas organizaciones de izquierda y movimientos feministas realizaron ayer una jornada de Apostasía Colectiva en la plaza central de esta capital con el objetivo de que la gente renuncie al bautismo del catolicismo, bajo el argumento de que "la Iglesia Católica recibe mucho peso político en el Estado y, gracias a sus afiliados, también es beneficiada con millones de pesos en subsidios".
Esta propuesta se había realizado hace varios años atrás y la idea de los organizadores es volver a hacerlo el próximo domingo 1 de octubre. Al día siguiente facilitarán las planillas, que fueron completadas por quienes aceptaron la propuesta, al Obispado de Santa Rosa para que comience con los trámites de "desbautizo".
La respuesta debería llegar 15 días después de haber entregado las planillas. Según confiaron los jóvenes, "la gente se sumó, lo tomaron bien y la aceptación fue muy buena".
En este sentido, Jonathan Gómez, uno de los jóvenes que participó de esta invitación a desafiliarse de la Iglesia explicó que "la apostasía es la renuncia a la iglesia, en este caso a la Iglesia Católica, y lo proponemos porque el Estado no es laico y se debería garantizar eso. Con esto tratamos de que toda la gente que no es practicante pueda salir de la lista de afiliados que tiene la iglesia a la institución", esto se debe a que "la iglesia, a través de la cantidad de afiliados que tiene a su credo recibe subsidios y recibe peso político en las decisiones del Estado".
Una de las problemáticas que evidenciaron los jóvenes fue que "la Iglesia recibe subsidios millonarios, por ejemplo, recibe 32 mil millones de pesos al año, que equivale a 333 veces más de los que recibe el presupuesto de Género".