Condenado a 15 años por abuso
El Tribunal de Audiencia condenó a un comerciante a 15 años de prisión por haber abusado de su hija y dio por demostrado que además de tres hechos puntuales de acceso carnal, entre los 13 y 16 años, durante ese tiempo hubo diversas situaciones "de tocamientos, roces, exhibiciones y demás acontecimientos también con contenido sexual".
La sentencia fue firmada ayer por los jueces Andrés Olié, Carlos Mattei y Daniel Sáez Zamora contra un hombre de 38 años, condenado puntualmente por los delitos de abuso sexual mediando violencia y amenaza, agravado por haber existido acceso carnal y por resultar el autor del hecho su padre, como delito continuado.
Además, se decidió mantener la prisión preventiva hasta que el fallo quede firme y rechazar un planteo de nulidad presentado por el abogado defensor Omar Gebruers quien cuestionó que se omitió producir el informe del artículo 82 del Código Procesal Penal, referido a la realización de un examen mental obligatorio al acusado.
"Debe rechazarse la pretensión de la defensa en el sentido de sostener la existencia de una actividad procesal defectuosa, precisamente por haberse omitido la realización del examen, ya que se ha cumplido -correcta y adecuadamente- con la incorporación del documento" del psiquiatra forense Martín Telleriarte asegurando que el imputado comprendía sus actos, indicó el tribunal.
Violencia.
Los jueces, a su vez, consideraron demostrado que el imputado penetró tres veces a su hija -desde que tenía 13 años hasta los 16- y agregaron que "amén de estos hechos puntuales de acceso carnal, durante todo ese tiempo existieron diversas situaciones de tocamientos, roces, exhibiciones y demás acontecimientos también con contenido sexual".
"Todos estos actos, siempre conforme la versión directa de la víctima, fueron posibles en función de la violencia física y psicológica que ejercía el acusado sobre ella y todo el grupo familiar; refiriendo múltiples hechos de violencia física y amenazas, temiendo incluso por su vida y la integridad física de sus hermanos", agregaron en la sentencia.
Los pedidos.
La fiscalía había solicitado una pena de 20 años de cárcel, mientras que la defensa fue por la absolución, considerando que los hechos no ocurrieron como fueron descriptos. El tribunal, para fijar la pena, tuvo en cuenta como una circunstancia especial, la extensión del daño causado ya que la menor padeció problemas personales y en las relaciones interpersonales, mermó su rendimiento escolar, mostró sentimientos de culpa por la situación que había denunciado y sufrió pesadillas y comenzó a tener miedo de salir sola.
La investigación fue iniciada a partir de la denuncia promovida por el director del establecimiento educativo donde la víctima, que hoy tiene 17 años, cursaba sus estudios, después de enterarse de los abusos a través de una profesora que se llevó a la alumna a vivir con ella a su casa, con la debida autorización de la Justicia.
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