Jubilado seguirá detenido

La jueza Florencia Maza mantuvo la prisión preventiva por otros 30 días al jubilado de 63 años denunciado por un supuesto caso de abuso sexual agravado con acceso carnal mediante la utilización de un arma, en un hecho ocurrido el 9 de julio en la noche contra una menor de 12 años.
La investigación fue formalizada hace un mes cuando Maza dispuso la preventiva hasta ayer, una medida que fue renovada, considerando la realización de la Cámara Gesell. La prueba fue hecha a principios de semana y el fiscal Fernando Fassina pidió una audiencia de reexamen de medida de coerción ya que vencía el plazo de la preventiva.
Allí, Fassina requirió que el hombre continué detenido hasta la finalización del proceso por entender que podría fugarse o entorpecer la investigación, mientras que la defensora oficial Silvia Annecchini se opuso y pidió la libertad inmediata de su cliente, pero propuso como medida sustitutiva el arresto domiciliario -en la casa de un amigo- y ofreció una restricción de acercamiento a la víctima.
La jueza Maza, ante el requerimiento de las partes, mantuvo la preventiva por 30 días, que caducará el 24 de agosto, por considerar que persiste el peligro de obstaculización a la justicia por parte del imputado, en sintonía con la solicitud de la fiscalía, que dentro de un mes deberá pedir otra audiencia de reexamen, sino el imputado quedará libre.
A su vez la jueza pidió a la Oficina Judicial que "instrumente las medidas necesarias" para que se proceda a la extracción de muestras de sangre del acusado y de la víctima para que se cotejen esas muestras con otros elementos secuestrados en la pesquisa. También pidió que se verifique los cabellos hallados en un guante que estaba en el domicilio del jubilado pertenecen a la menor.
Al hombre de 63 años se le atribuye haber atacado con un cuchillo a la niña. De acuerdo a la denuncia, y mientras ella caminaba por la calle, la tomó desde atrás, sujetándola de un brazo y en el otro portaba un cuchillo. Por la fuerza la llevó a un terreno. En ese lugar, mientras seguía amenazándola con el arma, cometió el abuso y después huyó del lugar.