"Macri viene por los sindicatos"

"Este Gobierno nacional pretende domesticarnos, y va a llegar hasta donde nosotros le permitamos", dijo el secretario general de la CGT Regional Centro-Sur, Luis Faggiani. El dirigente, quien estuvo presente en la concentración del martes último en la plaza de Mayo, dijo que las elecciones envalentonaron al macrismo, que no consideró que el 65% de la sociedad se le expresó en contra. Por otra parte, en diálogo con LA ARENA, evaluó que el peronismo provincial puede revertir la situación en octubre próximo, pero para eso "debe trabajar como corresponde".
-¿Cuánta gente se estima que había en la plaza de Mayo, y qué pasó con los incidentes?
-Todavía no hicimos estimaciones, pero en la previa se hablaba de entre 150 mil y 300 mil personas. Nosotros estuvimos como parte de la Regional Centro-Sur; y ya habíamos estado en la semana anterior en una reunión organizativa, y en una de las regionales, y ahora quedamos a la espera del Confederal convocado para el 25 de septiembre.
Lo de los incidentes fue una pelea entre dos facciones entre camioneros, pero fue más lo que se mostró en los medios que otra cosa, aunque no hay que minimizarlo. Es grave porque fue entre trabajadores de un mismo sindicato y en una organización tenemos que dar todas las garantías de seguridad.
-Algunos medios hablaron de fuerzas de choque...
-Ahí, en ese lugar donde estaban era bien de Camioneros, y desde la organización sabíamos que alrededor del escenario habría de ellos más de 2.000 personas, y lo que sucedió me parece que era que algunos querían demostrar que eran más "polenta" que otros, pero eran todos camioneros.
-Pero algo pasó, porque mientras algunos manifestantes estaban llegando otros ya se iban de la plaza.
-La idea era empezar a las 15, pero si antes estaba la mayor cantidad de columnas se empezaba, y en la organización lo sabíamos. Los del Movimiento Evita, que entraron por Diagonal Norte, sabían que esto era así y habían convocado a las 11 de la mañana. Y del mismo modo se dijo a todos lo que pasaba
-Habló (Juan Carlos) Schmid y muchos se fueron enseguida.
-Fue por eso que arrancó diez minutos antes, y en cuanto al discurso a lo mejor se esperaba que hablara más de uno, pero lo consensuado era que lo hiciera Schmid... La idea era desconcentrar lo antes posible, alrededor de las 4 de la tarde para evitar que se hiciera de noche. Para que no hubiera problemas.
-El reclamo giraba en torno al no a la flexibilización laboral.
-Sí, no a la flexibilización laboral, no a una reforma previsional; y un aumento de emergencia urgente para jubilados y un cambio en la política económica. Pero lo primero fue reclamar la aparición con vida de Santiago Maldonado.
-Dio para más de una especulación. Por una parte el Gobierno trató de minimizar, pero echó dos funcionarios.
-No lo hablamos todavía con los compañeros, pero me parece una cuestión lógica... El presidente Macri pensaba que como tenía dos funcionarios afines a los sindicatos iban a frenar la movilización, que le garantizaban que no se hiciera.
-¿Fue un castigo?
-Lo hizo como un castigo por no haber frenado la movilización. Pero no hay que comerse la propaganda de que los sacaron por cuestiones de las obras sociales. No fue por eso, sino que solamente cambiaron a dos funcionarios y seguro ahora pondrán algún CEO que tenga que ver con el gobierno.
-Macri está contra los sindicatos.
-Macri desde el comienzo viene por los sindicatos. No es casual la intervención de alguno, incluso con intervención judicial pero dirigida desde el Ejecutivo. Y en esto va a llegar hasta donde nosotros le permitamos. Como toda política liberal lo que pretenden es domesticarnos, ponernos bajo el pie y decir esto es lo que hay que hacer.
Salieron a decir que la marcha era innecesaria, no se sabe para qué es, no tiene sentido... y nos parece que minimizar una movilización de 400 mil personas en marzo y después otra de 200 mil, montado en el resultado de las elecciones es incorrecto.
-¿El Gobierno nacional lee mal el resultado eleccionario?
-Diríamos que no hace una lectura correcta, porque no tiene ni el 35%, parcial. El resultado le da favorable en la cuenta general, pero en la mayoría de los lugares suma apenas el 35%, y el 65% restante se manifestó en contra.
Una cosa es ganar y tener encolumnada a la sociedad detrás de un proyecto político, conseguir encolumnar a la provincia de Buenos Aires donde le pusiste todos los recursos, incluso en perjuicio de otras provincias como por ejemplo la nuestra; y otra diferente tener el 65% del electorado que piensa distinto.
Y resulta que termina empatando con Cristina, que ellos piensan que tiene que estar presa... Así que no es que ganaron.

"Para octubre puede cambiar"
"Me sorprendió el resultado electoral en La Pampa. No creía que iba a ser tan importante la cantidad de votos dentro de Cambiemos", admitió Faggiani al hacer referencia al acto eleccionario en nuestra provincia. "Es verdad que resultaba más atractiva la interna de Cambiemos; pero igual el peronismo tiene que hacer autocrítica porque se quedó con la tranquilidad de la interna ganada y pasó lo que pasó", expresó.
Luis Faggiani, quien participó al frente de la CGT Regional Centro-Sur de la movilización del 22 de agosto en Buenos Aires, hizo una evaluación de los guarismos del domingo 13, y también realizó algunas observaciones al modo de llevar adelante la campaña proselitista.
Sobre el modo de hacer campaña pidió "seguir con lo tradicional", pero actualizando los modos. "Hay que seguir con lo tradicional: los métodos de siempre fueron visitar a los compañeros en sus casas, preguntarles qué les pasaba y solucionarles los problemas, y en eso nos dormimos un poco. Pero además tenemos que usar lo tecnológico de una manera distinta, usar las redes sociales, de una forma más eficiente, más ordenada; tenemos que empezar de nuevo, profundizar lo que hacíamos y sumarle lo otro", pidió.
Rememoró Luis Faggiani que antes "al compañero los veíamos, y entonces se sentían identificados con el referente de su lugar; pero hoy observamos que algunos van, se sacan las fotos, las ponen en la red social y les parece que con eso está. Después se van y no vuelven más".
De todos modos el dirigente sindical señaló que "el peronismo tiene toda las posibilidades de cambiar para octubre si se trabaja como corresponde".