Madres desconfían de leche

Existe una controversia entre algunas madres que sostienen que la leche en polvo que se entrega en el hospital Evita "no está en buenas condiciones"; y lo que afirman las autoridades de ese establecimiento asistencial, quienes alegan que tienen en sus manos documentación que da cuenta que el producto "es apto para el consumo humano" y no presenta dificultades para su utilización.
Ayer por la mañana hubo madres que volvieron a quejarse porque el producto que se les entrega "no está en buen estado, tiene mal sabor, olor desagradable y presenta gorgojos".
Una joven madre -que llegó con sus dos criaturas de corta edad en brazos-, se ofreció a denunciar en nombre de todas la situación, y decidida en su acción tomó uno de los micros urbanos, desde el Plan 5.000, y llegó hasta este diario.
"Nosotros ya en julio habíamos mostrado, y nos quejamos, que se estaba entregando leche en polvo en mal estado; y allí fue que las autoridades cambiaron el producto y empezaron a entregar otra en buenas condiciones. Pero ahora volvieron a dar una leche que es intomable", dijo mostrando las cajas, e invitando al cronista a abrir una de ellas. Al abrirla se veían algunos puntos negros, que la madre indicó que eran gorgojos.

Quejas de madres.
La joven mostró también que en la caja dice que el vencimiento es en octubre, no obstante lo cual la leche de igual modo "estaba rancia, tiene feo gusto. Y lo peor de todo es que mis nenes (1 y 3 años, respectivamente) presentaban vómitos y diarrea la más chiquita, y el más grande gastroenteritis",
Explicó que son muchas las madres que se quejan, pero no todas están en condiciones de venir hasta el centro de la ciudad y expresar su malestar. No obstante advirtió que algunas están dispuestas a hacer una exposición policial, ante la situación.
También agregó que "algunas madres, que no tienen otra salida, igual 'disfrazan' un poco la leche con alguna cosa y se la dan igual a sus hijos, pero eso es muy peligroso", opinó.
La leche es entregada cuando a los bebés se les hace el control mensual, a razón de 4 kilos para los menores de un año, y dos para los chiquitos mayores de esa edad. "En realidad no alcanza para todo el mes, pero no tenemos otra", completó.
Sostuvo que quisieron hablar con el director del establecimiento asistencial, pero les dijeron que no estaba, y que cuando se quejaron ante la farmacéutica esta les dijo que tenían la orden de entregar esas cajas. La mamá también señaló 400 kilos en el depósito de la Farmacia del Hospital Evita, que estarían en las mismas condiciones.
De todos modos reconoció que en algún momento les dieron leche que -en la caja- dice que vence en 2016, y que esa "sí estaba en buenas condiciones".

Lo que dicen en el Evita.
Un equipo de este diario concurrió al hospital Evita, donde fue atendido por los médicos Hugo Argüello, jefe de Atención Médica; y Juan Breppe, jefe de Internación y de Guardia. Estaba ausente el director, Juan Manuel Canal, con carpeta.
Los profesionales explicaron -mostrando la documentación-, que el producto, leche "Body Viva con hierro", cumple "con todas las normativas de entrega". Un informe de Bromatología y Saneamiento Ambiental, firmado por Luis Ottavioni; y una nota de la Dirección de Maternidad e Infancia, rubricado por Héctor Bottagone, da cuenta que la leche es "totalmente apta para el consumo humano", tiene "olor y sabor no rancio, semejante a la leche fluida", y "cumple con el Código Alimentario Argentino y las normas del Mercosur".
Argüello argumentó que "lo que pueden notar de extraño es la leche que se entrega contiene hierro, y eso "le da un sabor distinto", pero "está en buenas condiciones", dijo, mientras abría una de las cajas mostrando el polvo que -este sí- parecía libre de impurezas.