Jueves 11 de abril 2024

Mendoza da marcha atrás con el trasvase del Grande al Atuel

Redacción 13/08/2011 - 03.16.hs

El gobierno de Mendoza ya comunicó oficialmente al Comité Interjurisdiccional del Río Colorado que desistió de encarar el trasvase de caudales del río Grande al Atuel y que concentrará sus esfuerzos en la construcción de la represa y la central hidroeléctrica de Portezuelo del Viento. Lo hizo ante los constantes pedidos de información que le realizaba la provincia de La Pampa -ya que tanto el Grande como el Atuel afectan a su territorio- como por las provincias de Río Negro y Buenos Aires, que temen que ese traspaso de caudales afecte la calidad del agua que utilizan para sus plantaciones y consumo humano.
La decisión de abandonar el polémico trasvase fue mencionada por el gobernador Celso Jaque a principios de año y ratificada luego en una reunión ordinaria del Coirco. Sin embargo, los restantes integrantes del comité de cuenca exigieron una nota que formalizara esa decisión y clarificara las prioridades mendocinas en este tema.
La nota fue ingresada en el mes de abril. Allí consta que la prioridad será la construcción de la represa y de la central hidroeléctrica al pie de presa, y que el trasvase no está contemplado en este millonario plan de obra. "La nota dice que dejan en suspenso el trasvase del Grande al Atuel", comentó una autoridad de Coirco. "Digamos que lo patearon a futuro, sin fecha concreta para hacerlo".

 

Más energía.
La decisión de Mendoza implica sacarse de encima un tema complejo y escabroso, y focalizar sus esfuerzos en Portezuelo del Viento, una gigantesca represa sobre el río Grande que acarreará beneficios inmediatos a la provincia de Mendoza pero también al resto de la cuenca del río Colorado. A Mendoza le permitirá poner miles de hectáreas bajo riego, generar un nuevo polo turístico y, sobre todo, sumar una enorme usina para la producción de energía eléctrica.
La obra será financiada en gran parte por el gobierno nacional merced a un acuerdo alcanzado en el año 2006 entre el entonces presidente Néstor Kirchner y el gobernador Julio Cobos. Este aporte millonario es una compensación por un juicio de promoción industrial que Mendoza hizo al gobierno nacional pero también representa una apuesta de Nación a fortalecer el sistema energético nacional, cada vez más demandado por el permanente crecimiento de la economía nacional y de la actividad industrial.
Al resto de la cuenca, la presencia de Portezuelo del Viento le dará una mayor capacidad de manejo de los caudales, una función que ahora está circunscripta a la represa de Casa de Piedra. Según el Instituto de Tecnología de Massachussets (MIT), un volumen apropiado para controlar el río Colorado sería una capacidad de embalse de 10.000 hectómetros cúbicos. Casa de Piedra aporta un lago con un volumen de 3.600 hectómetros cúbicos mientras que el reservorio de Portezuelo sería bastante menor, en el orden de 1.000 hectómetros cúbicos, producto de estar encajonado en la montaña.
El MIT realizó entre la década del '60 y del '70 una minuciosa investigación de la cuenca del Colorado en la que estableció las principales pautas de manejo del río. Ese estudio, pieza fundacional del Tratado del Río Colorado, contempló la posibilidad de quitarle agua al río Grande y trasladarla al Atuel. El punto de toma que menciona el Tratado es el paraje La Estrechura, ubicado aguas arriba de donde se levantará Portezuelo del Viento, y el caudal establecido es de 24 metros cúbicos por segundo, con una opción que prevé 10 m3/segundos más.

 

En contra.
Néstor Lartiri, representante pampeano en el comité de cuenca, recordó que en el año 2004, Mendoza solicitó al Coirco un cambio en el punto de trasvase, pedido que fue aprobado por mayoría ya que La Pampa se opuso. Los sitios que aparecían como más aptos para el nuevo punto cero del trasvase eran el propio Portezuelo (al pie de la represa) o bien un paraje más al sur, llamado Bardas Blancas, donde Mendoza proyecta construir en un futuro el dique compensador de Portezuelo.
En agosto del año 2008, los gobernadores de la cuenca reunidos en la capital cuyana le dieron la autorización a Mendoza para empezar a desarrollar el proyecto de obra para la represa y la cabecera del trasvase. Fue la misma reunión donde se suscribió el acuerdo para impermeabilizar parte del río Atuel a fin de evitar pérdidas y compartir del agua recuperada, acuerdo que Mendoza nunca ratificó.
"Cada vez que ellos traían un estudio o un informe, nosotros le preguntábamos dónde estaba el trasvase, porque no lo veíamos", comentó Lastiri a LA ARENA. "Nosotros éramos los más interesados, pero también Buenos Aires, que tiene muchas áreas irrigadas con el Colorado, y Río Negro", acotó.
"Como los estudios no contemplaban el trasvase, la situación se había complicado y Mendoza decidió que lo mejor era sacarlo para poder avanzar con Portezuelo", señaló el delegado.

 

Aguas claras.
Abandonado el proyecto del trasvase, Mendoza destina todos sus esfuerzos a avanzar con Portezuelo. De hecho, en el Coirco no pasa un mes sin que aporte algún estudio técnico o ambiental. "Son estudios técnicos, de aguas claras y los programas de embalses y desembalse, que son fundamentales para las normas de manejo de caudales", puntualizó Lastiri.
En el Coirco estiman que si Mendoza sigue a este ritmo, a fin de año estará en condiciones de pedir una nueva reunión de gobernadores de la cuenca para solicitar la autorización para comenzar con la construcción de Portezuelo del Viento. "Es una obra de largo aliento, que demandará muchos años de trabajos", indicó Lastiri. "Como mínimo, 5 ó 6 años", estimó.

 

"El trasvase no es tan caro"
Los políticos mendocinos que meneaban el trasvase de caudales del río Grande al río Atuel como alternativa a los permanentes reclamos pampeanos por el río Atuel, se quedaron sin su muletilla más cómoda. "La solución es el trasvase" es la frase favorita de muchos políticos y dirigentes mendocinos cuando deben intentar una respuesta al sempiterno reclamo pampeano para que el río Atuel escurra en forma permanente por su territorio. Una respuesta evasiva que, como es habitual del lado mendocino, refleja la postura mayoritaria de no cederle agua a La Pampa del propio río Atuel, sino usar su cauce para trasladar un porcentaje del caudal de otro río, el Grande.
El más reciente fue el fallido precandidato presidencial del radicalismo Ernesto Sanz, que en abril visitó nuestra provincia en el marco de su campaña electoral. Reflejando poco conocimiento del tema, el senador aseguró que el trasvase del Grande al Atuel "es una obra estratégica y no tan cara" y prometió que si llegaba a la Casa Rosa ésta iba a ser una de sus prioridades.
Sanz cerró aquella conferencia de prensa con la frase "muchachos, el Atuel no alcanza para todos", un concepto que pone en blanco sobre negro que para él y gran parte de la dirigente política cuyana, el río Atuel es, principalmente, mendocino.

 

"Portezuelo es necesario"
"Portezuelo del Viento es necesario", subrayó el especialista en temas hídricos Edgar Morisoli. La represa sobre el río Grande "permitiría un mejor manejo de los embalses actuales y futuros porque si hay que llegar a 10.000 hectómetros cúbicos, hay que pensar en Casa de Piedra, Portezuelo del Viento, y algo más también". Los 10.000 Hm3 fueron estimados por el MIT, que en su estudio advirtió que a diferencia de otros ríos, el Colorado no tienen en sus nacientes lagos ni lagunas que representen un freno a las avenidas de agua.

 


' '

¿Querés recibir notificaciones de alertas?