Postergaron juicio

El juicio oral y público contra José Antonio Turrión, acusado del asesinato de su hermano Cristian Aníbal Turrión, ocurrido el año pasado en la localidad de Miguel Riglos, se postergó para la próxima semana debido a que el imputado se descompensó ayer antes del inicio del debate.
El joven de 19 años, único acusado, fue internado en el hospital Lucio Molas por una descompensación. Es que desde hace cinco días está en huelga de hambre y según los médicos, no está en condiciones para afrontar el proceso judicial, que estaba previsto comenzar ayer.
Sin embargo, en la sala 7 de la Ciudad Judicial se presentaron algunos familiares que incluso mantuvieron un cruce verbal. "Lo hace para retrasar el juicio", advirtió un familiar. El juicio comenzaría la semana que viene, aunque esto en realidad depende del estado de salud del imputado.
Turrión está acusado por homicidio cometido con alevosía mediante el uso de arma de fuego en concurso real con el delito de tenencia de arma de fuego de uso civil como calificación legal principal y subsidiariamente, homicidio simple con tenencia de arma de fuego.
El fiscal interviniente es Carlos Ordas, quien considera de acuerdo de las pruebas que constan en el expediente que el acusado fue el asesino, y el tribunal está conformado por Carlos Mattei, Florencia Maza y Daniel Sáez Zamora. El defensor oficial es Martín García Ongaro.

El caso.
Cristian Aníbal Turrión, la víctima de 36 años, vivía junto al imputado y su madre en una vivienda de la calle Chaco 283 de la localidad de Miguel Riglos. Justamente fue María Ester Narvaláz quien encontró a su hijo tirado en un charco de sangre.
El hombre tenía un disparo de arma de fuego en la cabeza, precisamente en la nuca. La policía encontró en el lugar una vaina servida calibre 22. El caso comenzó a resolverse cuando los resultados de parafina indicaron que José Antonio Turrión tenía rastros de pólvora en sus manos.