A un año de la promesa

"Es un logro para mí, después de tantos meses de gestión, que Avianca se interese en traer vuelos a General Pico y Santa Rosa. La empresa nos presentó este proyecto y esperamos que, a partir de julio o agosto, podamos contar con esta opción de transporte para muchos pampeanos que tienen que viajar diariamente a Buenos Aires".
La frase, textual, pertenece al actual diputado nacional por Cambiemos, el piquense Martín Maquieyra, quien en plena campaña electoral del año pasado hasta logró que un pequeño avión de la compañía ligada a la familia Macri descendiera en el aeropuerto de General Pico en la mañana del 6 de junio de 2017.
Cerrado agosto, un año después de la fecha que el diputado anunciara que comenzarían los viajes en triangulación entre Buenos Aires, General Pico y Santa Rosa, se podría arriesgar que la del joven PRO es otra promesa de campaña incumplida.
En aquella pomposa ocasión, Maquieyra contó con el apoyo del intendente santarroseño Leandro Altolaguirre, tan entusiasmado entonces como ahora se ha mostrado con la llegada de Lasa a la ciudad capital, y del propio Juan José Rainone, intendente de General Pico, que como no podía ser de otra manera vio con buenos ojos la iniciativa del legislador.
Lo concreto es que Avianca, desde hace alrededor de un año, sólo pudo habilitar un vuelo a Mar del Plata y una línea que sale de Buenos Aires y llega hasta Reconquista, en el norte de Santa Fe, con escalas en Rosario y la propia ciudad de Santa Fe, capital provincial.
Se esperaba para diciembre del año anterior que la "low cost" de cabotaje alcanzara otros destinos como Córdoba y Tucumán, pero nada de eso ocurrió, lo mismo que con nuestra provincia. Hay quienes especulan que aquella movida, con aterrizaje de una pequeña aeronave en su ciudad natal, resultó apenas una puesta en escena para dar una mano en la campaña electoral, una de las puestas en escena muy típicas en el partido del gobierno, un colorido cascarón generalmente vacío de contenido. Las pruebas, a la vista.