Crecen las consultas por seguros para viviendas

«No me quedaron más recuerdos», expresó Alicia Montesino, propietaria de la vivienda que explotó e incendió la tarde del domingo. Durante la mañana del lunes, el cuerpo de bomberos junto a personal de Camuzzi, realizaron las pericias para determinar el motivo de la explosión. «Hubo una importante pérdida de gas del calefactor y esa fuente de calor generó una acumulación de gas que llegó al piloto del termotanque», aseguraron.
Una fuerte explosión seguida de incendio se registró el domingo en una casa de la calle Pasaje Rojas, entre Castro y 8 de Octubre, en el barrio Aeropuerto. El escenario era terrible: una montaña de escombros, vidrios de ventanas rotas de casas contiguas y más lejos también; había cristales esparcidos por toda la cuadra, a más de 50 metros de la casa afectada. Una dotación de Bomberos de la Policía de La Pampa trabajó en el lugar para lograr sofocar el incendio.
Afortunadamente no había personas en el lugar en el momento del hecho. «Vivo sola; el domingo no estaba acá. A las 9 de la mañana me había ido a pasar el día con mi mamá a Victorica. Cuando me avisaron estaba allá y cuando llegué ya era de noche», expresó Alicia Montesino, propietaria del inmueble afectado. «Sólo estaba mi perrito Salvador que lo pudieron rescatar por suerte. Siempre pasamos los domingos con mis hijas y mis nietos», continuó.
Según fuentes oficiales, por la explosión y el incendio se produjeron daños totales en la parte delantera de la casa, donde hay living, cocina, comedor, salón y un baño. «Toda la casa está destruida. Estoy muy dolida porque en esta casa tenía recuerdos. Hace 7 años perdí un hijo que vivía conmigo acá. Lo que más me duele hoy por hoy, más allá de lo material, es que no me quedaron más recuerdos», expresó muy conmovida Alicia a RADIO NOTICIAS.

Daños totales.
El frente de la casa tiene a su derecha un salón, donde las paredes se mantuvieron aunque el techo se cayó, pero todo lo que es la cocina y comedor se derrumbó. «Están analizando tirar todo», afirmó la damnificada. Y continuó: «El salón era el estudio de mi hijo, Maximiliano Pescara, que juega al fútbol en Italia y que se fue la semana pasada. Después de tanto tiempo me había venido a visitar». «En el comedor tenía un televisor que me compré el mes pasado que debe haber volado, computadora, los aires acondicionados, el tanque del agua está tirado en el patio destruido», completó.
«Se alcanzaron a salvar los juegos de dormitorio porque todavía el techo no se cayó pero se está por caer», explicó. Durante la tarde del lunes, integrantes de la familia extrajeron pertenencias personales de las habitaciones y de la montaña de escombros frente a la casa, a quienes se podía ver muy movilizados por la situación.
¿Dónde pasaste la noche? ¿Tenés dónde vivir?
Pasé la noche del domingo en la casa de mi pareja. Salvador se fue a la casa de mi hija. Recién llamé a un amigo que tiene una inmobiliaria para que me consiga un departamento donde poder alquilar y empezar a levantar de nuevo mi casa. Yo quiero vivir acá. Me dijeron que la casa tiene seguro, que tengo que hablar con la gente del IPAV. Hoy lo importante es la vida y estoy bien. Podría haber estado adentro.

Pericias.
Durante la noche del domingo y la mañana del lunes, el cuerpo de bomberos junto a personal de Camuzzi realizaron las pericias que confirmaron fehacientemente el motivo de la explosión. «Hubo una importante pérdida de gas del calefactor y esa fuente de calor generó una acumulación de gas que llegó al piloto del termotanque», aseguraron. «Los daños que cometió la explosión se debió a que estaba todo cerrado y hubo una gran resistencia de la estructura. Si el material del techo hubiera sido más liviano como una chapa, hubiera volado sólo el techo», precisó el jefe de bomberos Enzo Ojeda.
«Los daños que hubo fueron terribles. La parte delantera es lo que más está afectado, donde hay living, cocina, comedor, estudio y un baño. No soy quien determina el derrumbe total pero tendrá que venir un ingeniero, arquitecto o maestro mayor de obra», completó. «Fue terrible porque uno siempre piensa que puede ser la casa de uno. Hay que pensar en la parte positiva y que la señora comentaba que nunca los domingos se retira de su hogar y ese día se retiró», señaló.
Para finalizar Ojeda recomendó «hacer una limpieza periódica de los calefactores y que siempre sea realizado por personal matriculado».