Hay múltiples reclamos por pérdidas en las cloacas

Una rotura en el cruce de las calles Calegaris y A. Grassi fue denunciada por una vecina del barrio Esperanza, de Santa Rosa. Frente a su comercio (del rubro bazar y juguetería), se acumula un cuenco de agua potable.
El caudal con el que llega el agua socavó el lugar, por lo que -según cuenta la afectada- hace unos días quedó varado un auto a causa de la profundidad. El reclamo proviene desde hace 40 días, y es paradójico para la zona ya que es una de las principales afectadas ante los eventuales cortes de suministro de agua de red.
Según contó la vecina, desde el municipio santarroseño atienden los reclamos a través de la línea telefónica, pero quedan sin efecto. En ese sentido, se pierde la cuenta de la cantidad de llamados que se asumen registrados en la Secretaría de Obras y Servicios Públicos.

Mandela
Un situación similar se origina en la intersección de Gaich y H. Maggi, en el barrio Nelson Mandela. En este caso, la rotura se observa señalizada por los propios vecinos.
A lo largo de dos cuadras es posible divisar el empedrado que queda a la vista, por la conformación de una especie de arroyo. El mismo continua por L. Salanueva, recorriendo siete cuadras hasta desembocar en Liberato Rosas.

Butaló
Unanue y Macachín es la intersección donde se estanca una laguna de aguas grises de todo el ancho de calle. La pérdida de agua proviene de las calles Las Jarillas y Pardu, creando un canal que se dirige hasta la Avenida Perón. Vecinos del lugar reclamaron y, ante la falta de respuestas, señalizaron las esquinas para prevenir al tránsito y peatones.
Por otro lado, Lara Meneces, vecina del pasaje Clavel del Aire contó una situación que se dio a partir de una pérdida de agua ubicada debajo de la raíz de un pino. Hace dos meses Dagsa envió una empresa subcontratada, que solo reparó una rotura de menor profundidad.