En gobierno vuelven a amenazar con expropiar el frigorífico de Uriburu

Si el actual dueño del frigorífico de Uriburu sigue planteando problemas para decidir el alquiler, desde el Centro Cívico hablan de hacerse cargo de la planta y dársela a los empleados.
El 22 de marzo pasado, Carlos Serrano y Ernesto Lowestein acordaron el contrato de locación para el alquiler del frigorífico de equinos de Uriburu, pero la demanda del primero para que la operación sea homologada por la justicia, en el marco de una quiebra planteada por la anterior dueña de la planta, obstaculiza la reapertura del emprendimiento.
Una alta fuente gubernativa confirmó esta información y hasta llegó a decir que "si esto no se arregla en el corto plazo, nos haremos cargo de prepo y pondremos la empresa en manos de los trabajadores".
El funcionario no ocultó el disgusto que generan las permanentes actitudes dilatorias de una de las partes, que impiden la ansiada reiniciación de actividades productivas y la vuelta al empleo de 50 trabajadores, despedidos desde mediados del año pasado, sin percibir sueldos atrasados ni la indemnización.
La semana pasada se supo que Lowestein ya realizó gestiones ante el Senasa para conseguir la matrícula habilitante del frigorífico, que le fue quitada a Serrano por deudas contraídas con el organismo nacional de sanidad animal.
Este dato administrativo significaba la culminación del largo proceso de negociaciones entre Serrano y Lowestein, pero ahora se conoció que la insistencia del dueño de supeditar el alquiler al visto bueno judicial, vuelve a poner en riesgo la consumación del contrato suscrito el mes pasado.
No es la primera vez que desde el Ejecutivo se menciona la posibilidad de expropiar el frigorífico y cedérselo en uso a los trabajadores. Esa alternativa fue dejada de lado cuando a finales del año pasado los empresarios involucrados avanzaron en las negociaciones en pos del alquiler.
La acción gubernativa contemplaría la expropiación del frigorífico de equinos y su puesta en funcionamiento en manos del personal despedido.