Murió instructor de vuelos accidentado

(General Pico) - El instructor de vuelos Jorge Angel "Vasco" Irastorza, de 41 años, falleció ayer a la mañana en el Hospital Municipal de la localidad bonaerense de General Villegas, donde se encontraba internado tras caerse la aeronave que tripulaba el lunes mientras instruía a un piloto, según confirmaron fuentes sanitarias. La víctima de este accidente aéreo, era oriunda de la localidad de Victorica, aunque desde hacía varios años estaba radicado en General Pico.
Irastorza llegó al centro asistencial villeguense con quemaduras en el 80 por ciento de su cuerpo, y con serias lesiones en las vías respiratorias, tras haber sido alcanzado por las llamas y haber inhalado los gases de la explosión, luego que el avión bimotor que tripulaba junto a Alberto Matías López, titular de la aeronave, se estrellara contra el piso y se incendiara por completo. Desde el centro salud en el que se encontraba internado, informaron que el deceso de Irastorza se produjo ayer a las 10.25, a raíz de una "falla multiorgánica".
Tras el accidente, el instructor de vuelos fue trasladado de urgencia al Hospital villeguense, donde se intentó estabilizarlo para luego disponer su traslado a la ciudad de Buenos Aires. Pese a los esfuerzos que hicieron los profesionales del centro de salud, no lograron estabilizarlo para poder trasladarlo y ayer a la mañana falleció.
Además, desde la dirección del Hospital de General Villegas, informaron que López, quien sufrió quemaduras 50 por ciento de su cuerpo, siendo la cara y los brazos las zonas más afectadas, fue trasladado al Hospital Alemán de la Capital Federal a bordo de un avión sanitario que llegó desde Buenos Aires. Desde el centro de salud dijeron que los parámetros vitales de López eran "estables", y que a partir de ello se lo pudo trasladar, previo a que fuera llevado a bordo de una ambulancia al aeródromo villeguense.
A los dos tripulantes de la aeronave, en el centro asistencial de General Villegas, se los indujo a un coma farmacológico para intentar estabilizarlos, y se los asistió con un respirador mecánico.

Caída fatal.
El siniestro se registró el lunes minutos antes de las 10, en el momento en el cual un avión bimotor en el que viajaban Irastorza y López se estrelló contra el suelo en el interior de un campo vecino al aeródromo local, a la altura del kilómetro 441 de la ruta nacional 33. De manera inmediata se produjo una explosión que calcinó las restos del avión, y que alcanzó a sus tripulantes.
Desde el aeródromo villeguense llegaron dos unidades del cuerpo de Bomberos Voluntarios local, que lograron sofocar las llamas. El instructor piquense luego fue trasladado con quemaduras en gran parte de su cuerpo al centro asistencial local, donde los médicos aunque hicieron lo posible, no lograron salvarle la vida.
El titular del avión, según informaron fuentes policiales, ya tenía licencia para pilotear aviones fumigadores y en ese momento realizaba con Irastorza un curso para aprender a manejar aeronaves bimotor. Tras el accidente logró salir por sus propios medios y fue trasladado al centro de salud en un automóvil particular, por un grupo de trabajadores rurales que realizaba diferentes labores cerca del sector del siniestro.
Personal policial señaló que la unidad en la que volaban Irastorza y López aterrizó y luego volvió a tomar contacto con la pista del aeródromo villeguense para volver a despegar. Sobre el final de la pista, la aeronave levantó vuelo, pero a los pocos metros cayó a tierra sobre su ala derecha. La caída provocó una explosión que alcanzó a sus dos tripulantes.
El lunes a la tarde arribó a la localidad bonaerense personal de la Junta de Investigación de Accidentes de la Aviación Civil, y ayer a la mañana terminó de tomar diferentes pericias, en pos de dar con las causales de la caída del avión Beechcraft Baron.
Al tratarse de una muerte provocada por un accidente aéreo, el médico forense Julio Blanco le practicó la autopsia al instructor pampeano, previo a que se hiciera la entrega de sus restos a sus familiares, quienes ayer fueron recibidos por el subcomisario César Colareda.