Tornado en Acha
Todo esto se produjo apenas minutos antes de la medianoche de ayer, a la altura del kilómetro 28, donde a la par de la ruta nacional 152 crecen voluminosos olmos plantados hace más de medio siglo, que en esta oportunidad se vieron notoriamente azotados por el vendaval que golpeó sobre sus tallos y ráfagas que los desplomaron sobre el camino principal.
En el capítulo que se relata, otro equipo de transporte que circulaba en dirección contraria al primero, maniobró también hacia su contramano como para evitar una colisión con su colega, pero pudo frenar antes de enfrentar los corpulentos troncos, gajos y ramas que se esparcían en el suelo.
Prevención.
Mientras en la comisaría se recibían avisos sobre situaciones semejantes en distintos puntos de la ciudad, dos patrulleros se establecieron en la ruta, donde casi automáticamente se produjo un boqueo en el tránsito. Una decena de camiones y otros tantos colectivos de larga distancia, como automotores particulares debieron permanecer sobre la cinta asfáltica hasta que se normalizó la situación, en principio con la habitación de circulación por una sola mano.
Los mismos policías con otros colaboradores se encargaron de ir paulatinamente despejando las ramas, teniendo que actuar con doble cautela, al notarse que el cableado de preensamblado -al otro costado de la ruta- que alimenta los artefactos lumínicos había sido cortado por la caída del mismo árbol, desgastado en su base.
Antes que reloj completara una vuelta, los automotores pudieron reanudar su marcha, pero se mantuvo la guardia de prevención hasta entrada la madrugada.
Más árboles.
Tal vez la caída de esos dos añosos ejemplares de olmos resultó ser el capítulo más significativo en torno a este fenómeno meteorológico, pero no fue el único lugar.
Fuentes policiales dieron cuenta de que en la comisaría se recibieron múltiples pedidos de auxilio o prevención por la caída de ramas y otros árboles. Concretamente asentaron solicitudes por árboles desplomados en los kilómetros 26, 28, 29 y 35 de la ruta nacional 152. En cada uno de esos sitios se llevaron a cabo las actuaciones correspondientes, sumando a las fuerzas de seguridad la labor de Bomberos Voluntarios, que también trabajaron arduamente para muchas veces cortar y luego retirar ramas y troncos de los árboles que afectaban la visibilidad.
Aunque en los sitios descriptos corresponden al área suburbana, también hubo gente que vivió momentos de zozobra en el área de los médanos, y dentro de la ciudad se registró la caída de un centenario caldén, coronando así una jornada afectada por las condiciones meteorológicas.
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