Victoria fue intervenida nuevamente

Si bien se debe aguardar una evolución sin complicaciones en una clínica de Neuquén, la beba nacida prematuramente en 25 de Mayo perdió parte de un pie y espera la recuperación en el otro.
Victoria, la pequeña nacida prematuramente y que sufrió quemaduras en el hospital de 25 de Mayo, fue intervenida nuevamente ayer en una clínica especializada de la capital de Neuquén. La operación habría sido rápida y exitosa, según revelaron familiares y el equipo médico, que trabajó aproximadamente dos horas.
La beba, que nació a casi ocho meses de gestación, había sufrido peligrosas quemaduras mientras permanecía en una incubadora situada muy cerca de un caloventor, mientras aguardaban su evolución en el hospital "Jorge Ahuad", de la población pampeana.
Pese a sus condiciones de sensibilidad y debilidad, Victoria soportó una primera operación a los 11 días de su nacimiento y ayer tuvo la segunda intervención, que los médicos aguardan con expectativa una respuesta favorable, en la clínica San Lucas, de Neuquén, según relatan las fuentes informativas de aquella zona.

Bajo peso.
Uno de los facultativos, Federico Maletti, declaró que la paciente "tiene el esófago perforado, por lo que se le colocó un catéter para poder alimentarla, ya que la preocupación es el bajo peso de la pequeña, que cumplió 15 días y no ha tomado leche".
Maletti, que es traumatólogo, se mostró optimista, pero pidió ser cauto, a la espera de la evolución de la nena, ya que al principio le habían amputado parte de su pierna derecha. "La cirugía viene evolucionando favorablemente, pero todavía es temprano", para un diagnóstico definitivo, alertó el profesional.

Evolución.
El especialista describió que "hay que ver dos puntos importantes: uno es la cirugía, que vaya evolucionando adecuadamente, que no se infecte la zona y que no aparezcan otras zonas de necrosis, que por ahora está evolucionando bien. El otro tema es la evolución clínica de la paciente, que tiene otras complicaciones. Es un paciente que pesa poco más de un kilo, es muy chiquitita, todavía hay bastante trabajo para hacer", en el equipo de neonatología.
En cuanto a las características del trabajo, Maletti indicó que "nos encontramos con un pie que tenía tejido necrótico, es decir falta de llegada de sangre porque se taparon las arterias y las venas más finitas, que generan la circulación. La cirugía consistió en la resección -extracción o amputación- completa de todos los tejidos necróticos para tratar de evitar que se infecte la zona y tratar de preservar la mayor cantidad de tejidos que estaban vitales".
Durante el procedimiento se generó un colgajo, con piel viva para recubrir el talón. "El colgajo es para cubrir esa zona del muñón, lo que va a permitir, si todo anda bien y no aparece una complicación en el futuro, que la pierna tenga un crecimiento bastante simétrico con la otra pierna, y el paciente pueda utilizar el talón para caminar que con una prótesis convencional, que se coloca por debajo de la rodilla", concluyó.