Domingo 17 de marzo 2024

Dos fotografías

Redacción 28/05/2016 - 02.00.hs

La imagen de la Plaza de Mayo vacía dijo mucho más que todos los discursos del gobierno de Cambiemos sobre la política argentina de nuestros días. En las redes sociales se subieron fotografías que se viralizaron inmediatamente mostrando el enorme contraste entre este año y el anterior. En el primer caso, se puede ver un paisaje desolador: agentes de las fuerzas de seguridad y un intimidante cerco de vallas que impedía el ingreso de las personas. En las imágenes del año pasado se ve la plaza desbordada por una multitud de quienes se sintieron convocados a conmemorar un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo con festejos que incluyeron actuaciones artísticas, fuegos artificiales y otras demostraciones de fervor popular.
Solo un año separa ambas imágenes. Parece mucho más tiempo y hasta dos países distintos. El centro político argentino por excelencia, el escenario de jornadas memorables esta vez estuvo vacío. Los gobernantes que el miércoles caminaron entre la Casa Rosada y la Catedral para el tedeum no tuvieron a su alrededor un marco de entusiasmo y calor popular sino un cepo de seguridad que los aisló del contacto directo con la ciudadanía.
El "festejo" oficial se llevó a cabo en la quinta presidencial de Olivos, detrás de sus altos muros, y solo participaron de él algunos pocos invitados. El pueblo se quedó afuera, sin saber de qué se trataba. El "cambio" prometido llegó y ya está instalado en el país con nítidos contornos. Es difícil saber cuántos de los que creyeron en él y lo apoyaron en las elecciones sienten que se dirige en la dirección esperada y cuántos se sienten defraudados.
Lo cierto es que el partido que llegó al gobierno lo hizo a través de una eficaz campaña de marketing televisivo y con el apoyo esencial de los grandes medios. Lo suyo no es la convocatoria popular, la política de masas, porque no la necesita. Desde el primer día en la Casa Rosada dejó constancia de que su desvelo no son las mayorías sino el poder económico al que viene beneficiando con sus medidas. El resto, cada vez está más claro, debe conformarse con paliativos.

 

Contra el tarifazo
En nuestra provincia va cobrando fuerza el rechazo a los brutales aumentos tarifarios y traduciéndose en acciones para frenar, o al menos atenuar, su aplicación. Movilizaciones de vecinos, presentaciones ante la Justicia, resoluciones de los diputados y hasta gestiones gubernamentales convergen en visibilizar un golpe económico muy duro a las economías familiares, instituciones sin fines de lucro, comercios, industrias, universidades, etc. Representantes de actividades comerciales también han hecho pública su preocupación por este tarifazo descomunal perpetrado en nombre del "sinceramiento" de la economía que está jaqueando.....
Así los pampeanos suman su disconformidad a las múltiples manifestaciones registradas en varias ciudades del sur patagónico. En ellas se pudieron ver muy nutridas marchas callejeras de vecinos que levantaron su protesta para hacerle ver al gobierno nacional que no están dispuestos a aceptar pasivamente una agresión económica tan desproporcionada.
Un informe periodístico conocido en las últimas horas revela que el valor del gas natural en nuestro país ha pasado a ser el más alto del mundo. Este dato revela por sí solo la real magnitud de esta medida y la insensibilidad del gobierno que ha llegado a tal extremo. Como ya se ha dicho en esta columna, no hay antecedentes en nuestro país de un aumento tan elevado de precios en los servicios públicos. Todos los casos anteriores -que los hay y en abundancia- empalidecen cuando se los compara con éste propinado por el macrismo.
Con el paso de los meses se va consolidando el perfil elitista del gobierno nacional y va ganando terreno entre los sectores populares el convencimiento de que la movilización es la única herramienta para no ser avasallados ni perder derechos trabajosamente conseguidos.

 

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