Milagro Sala no es Blaquier

El mismo tribunal de sobreseyó al poderoso empresario jujeño Carlos Pedro Blaquier por delitos de lesa humanidad cometidos durante la dictadura militar, acaba de ratificar la condena a Milagro Sala por daño agravado en una protesta realizada en 2011 contra el hoy gobernador de Jujuy a pesar de que no se encontraba en el lugar de los hechos. Así la Cámara de Casación Penal confirmó la condena en primera instancia a tres años de prisión en suspenso que aplicó el Tribunal Oral Federal pero, además, en lo que se puede leer como una muestra adicional de ensañamiento, pidió que se revocara un sobreseimiento por amenazas y se volviera a juzgar a Milagro Sala por ese delito.
Como se dijo, se trata de la misma sala del tribunal que liberó de culpa y cargo al poderoso empresario jujeño y propietario del imperio Ledesma con relación a su responsabilidad en los tenebrosos hechos conocidos como "La noche del apagón". En julio de 1976 tropas del Ejército, la Gendarmería y la Policía jujeña secuestraron a más de trescientos trabajadores en Libertador General San Martín y Calilegua utilizando vehículos de la empresa de Blaquier y las instalaciones de su ingenio para mantener secuestradas a las víctimas. Más de cincuenta personas que fueron detenidas en esos aciagos días permanecen desaparecidas.
En cuanto a la confirmación de los cargos y la condena contra Milagro Sala, la Cámara volvió a considerar como válidos a los testigos que hoy pasaron a desempeñarse como empleados del gobernador y cuyo testimonio sirvió para incriminar a la dirigente social a pesar de que se demostró que habían mentido durante las audiencias. Además la Cámara revocó la prescripción dictada por el Tribunal Oral Federal de primera instancia por la acusación de amenazas y ordenó que vuelva a abrirse esa parte de la causa y se le dé curso. La defensa de Milagro Sala anticipó que sumará ahora un nuevo caso para apelar ante la Corte Suprema de Justicia al calificar este fallo de "vergonzoso y arbitrario".
Otra vez quedó demostrado el perfil clasista de buena parte de la burocracia judicial. Aunque en este caso no despierte las iras presidenciales sino el respaldo incondicional de toda la estructura del gobierno de Cambiemos que en la provincia de Jujuy está llevando a cabo un experimento de revanchismo político sin precedentes, colonizando el aparato judicial con dirigentes adictos y fomentando el linchamiento judicial antes que la actuación independiente de los jueces.
El tribunal actuó en perfecta sintonía con sus antecedentes. Entendió que Milagro Sala es un "peligro" para la sociedad en tanto Carlos Pedro Blaquier es un "héroe civil" que colaboró con las fuerzas armadas patrióticas en su lucha "antisubversiva" contra el "enemigo interior". La ideología que destila el tribunal con sus sentencias quedó expuesta en forma palmaria. Los "valores" que defiende, también. Seguramente el gobierno jujeño estará de festejo al igual que sus aliados de las clases altas que han emprendido una cruzada contra la dirigente indígena para someterla, al igual que al resto de la sociedad, a los parámetros de obediencia que exigen desde sus sitiales de poder.