Arrancó el Clausura: los candidatos no se sacaron ventaja

All Boys y Deportivo Mac Allister igualaron ayer 1 a 1 en el marco de la primera fecha del Torneo Clausura de la Zona Norte de la Liga Cultural. Matías Sosa adelantó al conjunto visitante a los 14 minutos del complemento pero Jerónimo Gutiérrez, a los 33, puso el empate que pareció no conformar a ninguno de los dos.

 

En un encuentro que en principio partía como el más atractivo de la jornada, Mac Allister impuso su estilo en los primeros minutos de juego pero All Boys fue de menor a mayor para terminar arrinconándolo sobre el cierre del complemento, buscando una victoria de local necesaria para comenzar con el pie derecho su participación en el torneo.

 

El Depo, pese a que pudo ganarlo, se fue algo más conforme con el resultado obtenido por mantener su invicto en el Oficial y porque en el segundo tiempo sufrió más de la cuenta ante los continuos ataques de All Boys. El local, por su parte, se fue disconforme por lo expuesto desde la actitud, aunque preocupado porque el rendimiento del equipo no es el óptimo.

 

Inicial.

 

En el inicio fue Mac Allister el que propuso presión alta y de esa forma tuvo la primera clara en los pies de Agustín Zanoni que demoró la definición tras un gran pase de Ignacio Zúñiga. El Depo intentó lastimar con ataque post pérdida del rival, sobre todo cuando presionó al central alboyense Gabriel Charra.

 

La presión del rival le costó tiempo a All Boys que tardó en acomodarse en la cancha, sobre todo porque en la mitad no pudo sacar la pelota limpia para buscar en profundidad a los delanteros Guinchinao y Gutiérrez.

 

Pero con el correr de los minutos el local fue amoldándose al partido con Portillo como eje y con Alvarez y Canuhé flotando a su alrededor. Desde allí comenzó a generar los ataques aunque le faltó el último toque. Mientras, Mac Allister comenzó a desarmarse en la mitad porque ni Zúñiga ni Zanoni estuvieron finos en la marca y por momentos no pudo tener la posesión de la pelota.

 

La más clara del primer tiempo para el local estuvo en la cabeza de Guinchinao, que le erró por un metro al arco tras un gran centro de Canuhé. Por la visita, Sosa armó una gran jugada individual a pura gambeta, habilitó a Fernández que de media vuelta sacó un remate raso que encontró bien ubicado a Roston.

 

El juego, una especie de nuevo clásico por el presente de ambos, fue perdiendo calidad y se hizo más trabado que bien jugado. La última de la etapa inicial también fue del local, que de la mitad del primer tiempo en adelante hizo méritos suficientes para convertir pero no encontró la precisión necesaria para quebrar la valla del golero visitante.

 

Apertura.

 

Para el complemento, el técnico visitante Maximiliano Blanco mandó a la cancha a Lucas Rodríguez en lugar del debutante Benjamín Torres. El cambio le sentó bien al equipo porque el goleador histórico del club desequilibró por el sector derecho del ataque y le generó un problema a la defensa auriazul.

 

Sin embargo, cuando All Boys tuvo la pelota fue peligroso con su juego directo. Canuhé encontró un blanco en la derecha del ataque y desde allí manejó los ataques. El propio mediocampista ofensivo tuvo dos chances para abrir el marcador con remates desde afuera del área que se fueron cerca del palo izquierdo de Enzo Zarza.

 

La apertura del marcador llegó a los 14 minutos tras una combinación por derecha de Rodríguez, que ejecutó un pase a la cabeza de Sosa que anticipó a Braian Roston y de cabeza puso el 1-0 para el delirio del banco de Mac Allister.

 

Y un par de minutos más tarde Zúñiga tuvo en sus pies el segundo gol -que tal vez definía el partido- pero su remate se fue por encima del travesaño luego de correr 50 metros solo frente a Roston.

 

Empate.

 

Con el 0-1, Santa María mandó a la cancha a Gastón Palma y Federico Ihitsague para recuperar la posesión de la pelota y ser más vertical en ataque. Sin embargo los intentos fueron en vano hasta los 33 minutos, cuando Jerónimo Gutiérrez fabricó una pared con Guinchinao y fulminó a Zarza para poner el 1-1.

 

El gol significó un envión anímico para el local que tuvo la victoria un par de veces pero careció de efectividad. En la visita el gol en contra fue un baldazo de agua fría y apenas le quedó fuerzas para replegarse y aspirar a un contragolpe que nunca llegó. El tiempo restante se esfumó entre impresiones, reclamos e infracciones.

 

Con el pitido final de Enzo Arias, que expulsó a Sosa cuando desde el banco de suplentes, All Boys y Mac Allister repartieron honores en el duelo entre los dos grandes candidatos a luchar por el título culturalista.