Domingo 08 de junio 2025

La policía sigue los pasos del presunto entregador

Redacción 14/05/2011 - 04.47.hs

Pese al hermetismo de los investigadores, la policía habría comenzado a seguir una línea de investigación que podría terminar con la captura de la banda que robó más de medio millón de pesos de Calamari S.A. el domingo a la madrugada. De acuerdo a fuentes internas de la fuerza, esa pista la habría dado la filmación registrada por las cámaras de seguridad de la panadería ubicada a metros de la concesionaria.
Del análisis de los automóviles que pasaban a la hora en la que se estaba produciendo el robo y que fueron filmados, surgió la posibilidad de que uno de esos vehículos estuviera conducido por una persona a la que ahora se dirigen todas las miradas de los pesquisas. Ese rodado, una Pick Up Volkswagen gris, pasó al menos unas tres veces por el frente de la concesionaria.
El silencio de los investigadores impidió ayer conocer más detalles, no obstante, deslizaron que se estaría a punto de confirmar la hipótesis de que hubo un entregador local, quien informó a los autores materiales del ilícito sobre el inmenso caudal que contenía la caja de seguridad reventada.
Hasta el momento, la Brigada de Investigaciones no reveló ninguna información sobre los últimos avances del caso, aunque se pudo saber que agentes de esa división se encuentran operando en la provincia de Buenos Aires.

 

Robo del siglo.
El golpe a Calamari S.A ocurrió el pasado domingo 8 entre las 2.30 y las 3 aproximadamente. Un grupo de ladrones realizaron una brecha en el techo de chapa e ingresaron al local, el cual no cuenta con sistemas de alarma ni con cámaras. Luego ingresaron a la oficina donde se encuentra la caja de seguridad y la abrieron con un taladro a batería (en ese momento la ciudad se encontraba sin luz, por lo que se descartó la posibilidad de que hayan utilizado uno eléctrico). Del interior se llevaron 100.000 dólares, 145.000 pesos y 15 chequeras (556.000 pesos en total) y huyeron por donde habían ingresado.
Llamativamente, cuatro patrullas policiales y el guardia de seguridad de la empresa se encontraban afuera del establecimiento mientras los ladrones estaban operando en el interior, ya que estos últimos habían sido vistos en el techo por una vecina que alertó al Comando Radioeléctrico. Sin embargo, luego de realizar una revisión, los uniformados se fueron del lugar, dejándole a los atracadores la vía libre para escapar.

 


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