Abel Sabarots elogió a Ziliotto y cuestionó a la Cosega

El intendente de General Acha, Abel Sabarots, se metió en el debate local que cuestiona a la Cooperativa de Servicios Públicos (Cosega), destacó el apoyo del gobernador Sergio Ziliotto, le pegó por elevación al intendente de Santa Rosa, y -aún en veda- dejó en clara su postura política puertas adentro de Juntos por el Cambio.

El mandatario comunal fue el único orador en el marco del desfile que cerró, pasado el mediodía, el programa de festejos por los 141 años de la ciudad. Ante una gran cantidad de público, y con el ministro de Gobierno, Justicia y DDHH, Ariel Rauschenberger, como principal autoridad provincial, realizó un repaso de su gestión y anunció que comenzó a trabajar en forma conjunta con la Universidad de La Pampa para dar forma a un plan de desarrollo estratégico de la ciudad que "contemple lo social, económico y de desarrollo territorial" de General Acha.

En un par de ocasiones se refirió a "la grieta" y dejó en claro que ante los que van al "todo o nada" prefiere "la apuesta al diálogo y a la ayuda común entre gobernantes, sea cual fuere su color político, para constituir una agenda común de trabajo" en beneficio de su ciudad y de la Argentina en general.

En ese camino fue que elogió a Ziliotto. "Lo dije hace pocos días cuando se firmó el contrato para la obra de pluviales del barrio Oeste. Es el gobernador que más visitó Acha en muchos años y cada vez que vino trajo obras importantes. Eso habla de la agenda en común que hemos podido mantener y que aspiramos a ampliar", indicó.

También dejó loas al mencionar el proyecto de ley de mejora de la coparticipación presentado por el gobernador. "Es un paso adelante, un avance con recursos extras para los municipios más poblados" y allí, sin nombrarlo atacó al santarroseño Luciano di Nápoli, única voz disonante respecto del proyecto. "Estamos en posición distinta a los que tienen una visión de conjunto más mezquina y centralista que privilegia sus intereses por sobre los de todos", definió.

Sin embargo, avisó que "para las grandes obras de infraestructura, tendremos que seguir apelando, por sus altos costos, a los gobiernos provincial y nacional".

En otro tramo de su discurso, el intendente reveló que en lo que viene seguirá gestionando otras obras que entiende son prioridad, entre ellas extensión y más conexiones de cloacas, la renovación de parte de la red de agua potable y "un SUM para dar respuesta a la demanda. El único que tenemos en la ciudad está desbordado por la actividad, nos hace falta otro sitio para poder estar a la altura de los requerimientos".

Normalidad.

En el repaso de la relación con las instituciones de la ciudad, Sabarots señaló que profundizará lo que considera una relación seria y constante. Y tuvo párrafos aparte para la Cosega, a la que consideró "fundamental para la ciudad, no sólo por el trabajo conjunto con el municipio y los servicios concesionados, sino por todo lo que hace por la comunidad. Es estratégica".

Y reclamó "una necesaria normalidad institucional", en clara alusión a los retrasos de la cooperativa en hacer las asambleas postergadas donde, entre otros puntos, habrá vacantes que ocupar en el Consejo de Administración, lugares que muchos apetecen.

Sostuvo que "en particular con Cosega hemos hecho muchas cosas en conjunto. Obras de agua, todo lo relacionado a las modificaciones por la travesía urbana y especialmente el recambio del alumbrado público por led. Ya alcanzamos el 45% del total y seguimos gestionando para llegar a la totalidad y contribuir a una mejor calidad de iluminación y a la seguridad y el ahorro de energía".

Por último, manifestó que tras cuatro años "hemos recuperado terreno perdido respecto de la posición de Acha en nuestra provincia. Somos la tercera ciudad de importancia y estamos en crecimiento y desarrollo como lo indican los datos del último censo. Crecimos desde 2010 un 26%, muy por encima de la media de la provincia que es de 15,4%" y agregó que junto a su compromiso por seguir en ese camino dos de los puntos centrales serán "más viviendas y trabajo" para los achenses.

Festejo en las calles.

Puro espíritu achense se vivió ayer en la celebración de los 141 años de General Acha. Primero en el acto central, más adelante en el homenaje a los pueblos originarios y antiguos pobladores y luego con el desfile por las calles céntricas.

La presidenta del Concejo Deliberante, Judit Acri, fue la encargada del discurso central, enmarcado en el colorido que le dieron los abanderados de los establecimientos educativos, pueblos originarios y entidades intermedias.

Sabarots encabezó el acto, acompañado por funcionarios, concejales, autoridades de otras organizaciones gubernamentales, dirigentes sociales y una buena cantidad de público.

El frío de agosto se disimuló por el interés con que se siguieron los números artísticos, entre ellos la canción de la recordada Chela Gentile que interpretó la artista local Lila Acevedo mientras la escuela de danza bailó temas tradicionales.

Previo a este, el Taller de Lenguaje de Señas interpretó junto a la Banda Beato Ceferino Namuncurá el Himno Nacional Argentino, para luego darle lugar a la entrega de ofrendas florales a cargo del Ejecutivo municipal, el Concejo y la Cosega.

Mural recordatorio.

La celebración del aniversario achense tuvo un sentido acto de reconocimiento a los pueblos originarios, habitantes del lugar antes de que la ciudad fuera tal. Luego del acto protocolar, la comitiva oficial fue hasta el cementerio local donde quedó inaugurado un mural que los reconoce y honra.

"Cuando la sangre de las venas y el polvo de los huesos vuelva al suelo, quizás recordemos que esta tierra no nos pertenece, sino que nosotros pertenecemos a la tierra", dice la placa emplazada en el lugar.

Entre las comunidades originarias participan la Lonco Guillermina Gómez, acompañada por integrantes de la Comunidad Ñancufil-Calderón, Lonco miguel Sotelo Patiño con integrantes de la Comunidad Ranculche Panguetruz Gner, descendientes de Mariano Rosas, del Cacique Tripailao, integrantes de la familia López descendientes del Cacique Pichihuinca, y familiares de los pobladores que construyeron la ciudad.

En la ocasión, las palabras fueron del director de Cultura, Agustín Berhau, y el párroco de la Iglesia La Inmaculada, también extendió su bendición a los fallecidos y familiares de los mismos.

El mural es una obra fue construida por Daniel Morales, Daniel Pedernera y Daniel Recuero.

Sin dudas que uno de los momentos más significativos del homenaje fue el discurso de la tataranieta del Cacique Tripailao, Verónica Tripailao que contó su historia y para el final dejó la frase "pisamos tierra firme porque somos Tripailao".