El senderismo, una opción saludable

En cualquier fin de semana se puede observar grupos grandes de personas que recorren caminos vecinales, senderos rurales, llevan botellas de agua, buen calzado y ropa cómoda. El senderismo es una actividad deportiva no competitiva que busca acercar a la ciudadanía al medio natural utilizando, generalmente, caminos de tierra, evitando en lo posible el tránsito a de las rutas asfaltadas y aprovechando los días agradables y cálidos.

 

¿Pero es una actividad que la pueden hacer personas de todas las edades? La respuesta es sí. Y este artículo se centrará en la importancia que tiene que los adultos mayores muevan su cuerpo a través del senderismo porque esta actividad cumple con creces la media hora diaria recomendada para ejercicio físico. Además de que caminar aporta grandes mejoras al cuerpo de las personas de cualquier edad y de las mayores en particular porque alivia los dolores de espalda, previene la osteoporosis, mejora la artritis, entre otros males que vienen con la edad.

 

Hay que hacer hincapié en que el senderismo no es solo caminar, andar por lugares bonitos y agradables, respirando un aire más puro que el de las ciudades y en un ambiente de tranquilidad, sino que también ayuda a la mente y a la socialización. Este tipo de actividades siempre se desarrollan en grupo que luego del ejercicio se juntan a compartir la merienda.

 

Adultos mayores.

 

"Huellas Pampa" es una de las opciones que encuentran los adultos mayores de Santa Rosa para practicar el senderismo. La creadora del grupo es la profesora de educación física Marisa Balduini, que hace 35 años se dedica a brindar clases de entrenamiento a personas mayores de 60 años. Cada quince días, los sábados por la tarde, la profesional encabeza la multitud para guiarlos por caminos vecinales de la capital pampeana o Toay.

 

Siempre selecciona un espacio distinto porque el objetivo es que las personas conozcan cada fin de semana un lugar nuevo. Las distancias son largas, por fuera de la ciudad, pero se realizan de "forma moderada, sacándonos fotos, disfrutando del entorno natural de manera grupal", explicó en diálogo con LA ARENA.

 

Es más, "cada uno lleva su mate, reposera" para luego de elongar, tomar mate y comer torta. Ya visitaron el médano La Olla, la Estancia Las Malvinas, senderos entre Toay y Santa Rosa, El Mangrullo, caminos por la ruta 14.

 

Gran demanda.

 

Cuando los adultos mayores se jubilan, algunos eligen atracciones culturales, otros viajar, quedarse en casa todo el día, pero también están aquellos que comenzaron a mover el cuerpo, en este caso con entrenamiento físico con especialistas. El cuerpo necesita ejercitarse para calmar las dolencias propias de la edad y mejorar la calidad de vida. Aunque no se puede olvidar que es una gran oportunidad para socializar con pares y organizar jornadas por fuera de las clases.

 

"Somos muy pocos los profesores de educación física que trabajamos con adultos mayores", aseguró Marisa, es por ello que la profesional se centró en brindar entrenamiento a personas que comprenden este rango etario porque "hay mucha demanda" y es una franja de edad que está "en ascenso". En ese sentido, subrayó que "gracias a la ciencia y la medicina, la vida se ha alargado sustancialmente. El modelo hoy es de un adulto mayor activo, que viaja, hace gimnasia, va al teatro".

 

"Jubilear".

 

La profesora hizo hincapié en que las personas que asisten a sus clases son jubilados y están "en la etapa de jubilear, de pasarla bien haciendo cosas que siempre quisieron hacer en su vida, que en la época activa no pudieron". En ese entonces, mencionó que muchos de ellos "desde la juventud no hacen ejercicio y ahora se encuentran con que lo necesitan porque a medida que pasa el tiempo el cuerpo envejece, empieza a doler y aparecen enfermedades comunes a la edad, como artritis, artrosis, dolores articulares, hipertensión, etcétera". Subrayó que "la indicación médica para mejorar la calidad de vida es la actividad física".

 

Pero por otro lado están aquellos que desde hace 30 años que asisten a los entrenamientos con Marisa. "Es el 50 % de mi alumnado", destacó y sostuvo que "encuentran que la actividad física les hacen muy bien, se sienten muy vitales, llenos de energía, desaparecen muchas dolencias, mejoran los análisis médicos. Cuando empiezan a ver ese cambio, no dejan de hacer ejercicio".

 

Marisa trata de transmitir todos los beneficios que tiene realizar actividad física en esa franja etaria. "Es un convencimiento que tengo", afirmó y contó que les explica que deben "comer bien, tomar agua, utilizar buen calzado. La salud y el ser una persona saludable incluye muchas cosas". En ese contexto, expresó que es "notoria la diferencia" entre un adulto sedentario y uno que se mueve porque éste último "no tiene problemas posturales porque es lo que trabajamos".

 

Y claro, no todo es ejercicio, no todo es mantener la vitalidad porque la energía también se consigue con el grupo de pares y de pertenencia, como sucede durante las jornadas. "Hay socialización", resaltó Marisa y sostuvo que "los adultos necesitan encontrarse con otros; ya se hicieron amigos, se juntan fuera de las clases, hacemos asados de grupo, organizan viajes. Cuando llego me encuentro con personas que me esperan con ansias y alegría. Eso es para mí muy gratificante y me genera un profundo deseo seguir dándoles clases".