Es insulinodependiente y no tiene luz en su vivienda

"Desde la CPE estamos haciendo todo lo que está a nuestro alcance para resolver lo antes posible este caso, como prioritario por razones humanitarias". Esa fue la expresión que utilizó Alfredo Carrascal, presidente de la Cooperativa de Electricidad de Santa Rosa cuando se le expuso la situación de una mujer que atraviesa dificultades.

 

Concretamente carece del servicio de energía eléctrica, con lo que no puede mantener en su propia vivienda los medicamentos que necesita -es insulina dependiente-, que tiene que alcanzárselos diariamente su padre trasladándose de un sector alejado de la ciudad donde reside.

 

Ayuda familiar.

 

Carina Alejandra Cisneros (48) es una mujer que vive hace unos tres años en Tello Norte 1572, pegado al Santa María de Las Pampas. Su padre, con mucho esfuerzo, empleando todos sus ahorros pudo construirle una vivienda en el asentamiento que está pegado a ese barrio.

 

Héctor "Camacho" Cisneros es el papá de Carina; y la ayuda en forma permanente, igual que su hermano Ceferino que en Guatraché trabaja con los menonitas haciendo fletes. La mujer trabajó 20 años en tareas de limpieza en la Comisaría de Miguel Riglos; y tiene una hija, Luján, de 23 años, que es empleada de comercio y también hace tareas de limpieza y que en lo que puede también colabora con su madre.

 

Neuropatía diabética.

 

Carina padece de una neuropatía diabética crónica, y se vino a vivir a Santa Rosa hace tres años, cuando se le empezaron a lastimar las piernas por la enfermedad. "Primero me amputaron una pierna y al año la otra; y la verdad es que es algo que no le deseo a nadie", cuenta sobre su triste situación.

 

Su papá -que lleva el apodo de "Camacho" porque alguna vez se dedicó al boxeo- vive en el barrio Peñi Ruca, y quienes lo conocen lo tienen como "un hombre muy laburante. Fue él quien con sus ahorros me ayudó a construir esta vivienda porque en la suya yo no podía vivir, porque no tiene las condiciones para poder movilizarme con la silla de ruedas... él aquí levantó esta casa con sus ahorros, con puertas amplias, con un baño adecuado... pero no tengo luz", se lamenta.

 

Sin heladera.

 

Lo cierto es que más allá de tener un lugar donde vivir, la tiene complicada: "Lo que pasa es que soy insulinodependiente, y como no tengo conectada la energía eléctrica no puedo tener heladera y se me complica todo. Por eso mi padre tiene que venirse todos los días desde el Peñi Ruca para traerme los medicamentos, porque aquí lo único que tengo es una heladerita de hielo portátil... y cómo hago para ir a buscar el hielo", agregó con tino.

 

Trámites fallidos.

 

Ante esa circunstancia la familia realizó diversos trámites. Primero se dirigió a la Cooperativa Popular de Electricidad de Santa Rosa a pedir la conexión de la energía -hace ya un tiempo-, pero allí le indicaron que tenía que haber una autorización expresa de la municipalidad de Santa Rosa. Cuando fue con ese requerimiento con la intención de ver al intendente Luciano Di Nápoli fue atendida por un secretario que la derivó al Centro de Acción Social de la calle Errecalde. "¿Qué me contestaron ahí? Que no podían hacer nada... Y nos mandaron de vuelta a la CPE, que era de dónde veníamos", reprochó.

 

"Estoy desesperada y no puedo seguir así mientras mi salud se deteriora todos los días. Creo que es una cuestión de humanidad. Mi padre tiene que venirse todos los días desde el Peñi Ruca a traerme los remedios porque los tiene en su heladera para que se conserven... ahora viene el verano y será peor, porque ni un ventilador puedo tener", se quejó.

 

Si quieren conectan.

 

Ante la consulta realizada por este diario en la Municipalidad la respuesta fue que "la CPE no necesita ninguna autorización, y cuando considera que debe hacerlo conecta la energía", dijeron.

 

Trasladada la consulta al presidente de la CPE, Alfredo Carrascal, de alguna manera se comprometió a resolver el tema "de modo prioritario" por razones "humanitarias". Si la promesa se cumple el calvario de Carina será menos ostensible. Ojalá que así sea.