Sabado 23 de marzo 2024

Obra pública: dato mata relato

Redacción 08/09/2022 - 08.32.hs

En nuestra provincia y en todo el país el crecimiento de la obra pública está colaborando decididamente a bajar los niveles de desempleo. Las estadísticas son elocuentes pero también las expresiones de los propios involucrados. En el caso de La Pampa tanto los intendentes municipales como los representantes de las organizaciones sindicales vienen hablando acerca de las dificultades que hoy se manifiestan a la hora de buscar determinadas profesiones porque están muy requeridas en un escenario de notable recuperación de las actividades vinculadas a las diversas ramas de la construcción.

 

En verdad, no es ningún misterio. Desde siempre se sabe que la presencia activa del Estado a la hora de promover, estimular, el desarrollo de la economía arroja frutos que más temprano que tarde derraman sus beneficios en la sociedad. En Argentina los ciclos de gran crecimiento de la obra pública coincidieron con mejoras sustanciales en los ingresos y la calidad de vida de los sectores populares. Pero no solo aquí; en los Estados Unidos la obra pública cumplió un papel primordial cuando su presidente Franklin D. Roosevelt planteó su "new deal" para sacar al país de la profunda depresión que había provocado la crisis económica desatada en 1929. El plan de construcción de grandes represas hidráulicas data de ese período y posibilitó la generación masiva de fuentes de empleo para aliviar la tremenda desocupación que en aquellos años afectaba a la sociedad estadounidense.

 

Sin embargo, a pesar de estos datos categóricos de la realidad, el avance de la derecha neoliberal en nuestro país ha puesto en entredicho la relevancia de la obra pública. Con su discurso antiestatista, con su apuesta en favor de la especulación financiera, con su desprecio por el desarrollo de la industria nacional y el bienestar de los sectores populares, los talibanes de la apertura irrestricta de la economía y de la jibarización del Estado pusieron en práctica sus ideas y en los cuatro años de gobierno de Mauricio Macri redujeron la inversión pública hasta prácticamente hacerla desaparecer. La Pampa sufrió en carne propia la gran sequía en materia de obra pública, al punto que ni siquiera terminaron cuatro jardines de infantes que dejaron por la mitad, abandonaron a su suerte las rutas nacionales cortadas por las lluvias y cortaron de cuajo el presupuesto para la construcción de viviendas, entre otras lindezas. En el resto del territorio nacional sucedió lo mismo, con excepción de algunas provincias aliadas y privilegiadas. Ni siquiera terminaron las decenas de miles de viviendas que había empezado el gobierno anterior en virtud de un espíritu de revancha impropio de la vida en democracia.

 

El resultado de esa experiencia neoliberal en materia de nivel de empleo fue catastrófico: en apenas cuatro años se duplicó la desocupación, el aumento más pronunciado de este flagelo bajo un gobierno elegido por el voto popular. Cabe aclarar que en este punto también colaboró el cierre de decenas de miles de Pymes en todo el país.

 

Es de aguardar que estas experiencias tan contrastantes ayuden a superar definitivamente este debate. Dato mata relato.

 

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