Científicos con turbante

Un safari al desierto, la montaña rusa más rápida del mundo, una mezquita, una cultura distinta y el valor de conocer y relacionarse con adolescentes de todo el mundo fueron algunas de las vivencias que se trajeron en las valijas los integrantes del club de ciencias Amun Kamapu de Santa Rosa tras participar en una feria en los Emiratos Árabes Unidos, una experiencia que resultó "alucinante".
"Nosotros expusimos dos trabajos: por un lado Cosiendo Igualdades Industriales, que es un dispositivo adaptativo para máquinas y herramientas que puede ser utilizado por personas con discapacidad y, por otro, un taller de juegos de lógica y matemática que se utiliza para incentivar a los jóvenes en los cálculos", explicó Walter Vargas, de 21 años, presidente del Amun Kamapu, que en lengua ranquel quiere decir "mirar lejos".
A ese destino lejano también viajaron Mariel Matta (20), Federico Casarrota (13), Nicolás Bucher (12) y Daniela Marietti (13), acompañados por los docentes Ricardo Caso, Ruth Domín-guez y Cristina Ércoli.
Además, en la delegación pampeana viajaron Camila Holzman y Daniel Luna, alumnos del colegio Provin-cia de La Pampa que junto a la docente Alicia Pacca-pelo expusieron el proyecto "El Tercer Ojo", un dispositivo de seguridad para los automóviles que evita las colisiones frontales.

Abu Dhabi es la segunda ciudad más poblada -la primera es Dubai- de los Emiratos Arabes Unidos, en el Golfo Pérsico. Allí, rodeada del desierto, vive una población cosmopolita, que se mueve al ritmo de la riqueza que genera el petróleo y con pautas culturales bastante diferentes a las que rigen la vida argentina y occidental.
"Lo que más me llamó la atención son las diferencias entre hombres y mujeres; hay muchas cosas que las mujeres no pueden hacer y los hombres sí. Hay lugares públicos en los que tienen que estar separados y muchas de ellas están todo el tiempo tapadas", destacó Nicolás.
"Cuando fuimos a la mezquita -es el lugar de culto para los musulmanes, el espacio adonde van a rezar sus oraciones de la fe islámica- nos preparamos para una foto y enseguida vino un hombre de seguridad a avisarnos que no podíamos ni tocarnos ni abrazarnos, no podíamos tener muestras de afecto, digamos. En otros lugares es más relajado, pero sí, esas cosas llaman la atención", reconoció Mariel.
Los jóvenes santarroseños participaron de la XIV ExpoCiencias Internacional ESI, un evento organizado por el Movimiento Interna-cional para el Recreo de la Ciencia y la Tecnología (Milset). La actividad se realiza cada dos años, concurren alumnos de distintos países del planeta y no tiene un carácter competitivo sino solo expositor.

"Fue una gran experiencia porque debíamos exponer en inglés, así que eso fue todo un desafío, porque hablás o hablás, no hay opción. Antes de viajar estudiamos un montón y allá la práctica te va dando más soltura, pero lo bueno es que te comunicabas con gente de países muy diferentes como la India, África, Pakistán, Corea del Sur o Qatar", destacó Walter.
¿Cómo les fue con los proyectos que expusieron?
"Muy bien. En el caso de Cosiendo Igualdades, la gente se interesaba mucho porque veían que en nuestro país la discapacidad se aborda de una manera relevante. En todos lados la gente con discapacidad tiene muchos problemas para insertarse y esta idea permite tener un trabajo, mejorar su vida, tener más posibilidades, así que estuvo bueno porque se interesaron mucho", contó Walter.
"Nuestro proyecto es sobre juegos matemáticos y es muy interactivo. Me sorprendió cómo se prendió la gente porque por ahí uno piensa que con matemática es difícil atraer la atención, pero se genera mucho atractivo", agregó Mariel.

Cosiendo Igualdades, forjado en sus inicios en 2008 por dos ex alumnos (Jonathan Aguirre y Walter Benvenuto) de la EPET de Santa Rosa, participó en distintas ferias internacionales y ha recibido varios reconocimientos. "Hoy está en su tercera fase de desarrollo ya que en un principio fue pensada para uso doméstico, pero hoy ofrece la posibilidad de una utilización industrial. En esa instancia fue que se presentó en Abu Dhabi", detalló Walter.

El viaje también implicó vivencias exóticas como pasear en camello, visitar un campamento beduino en el desierto y vestirse de árabes. O cargadas de adrenalina, como la visita al parque temático de la marca italiana de autos Ferrari.
"Subimos a la montaña rusa más rápida del mundo donde en tres segundos pasa de 0 a 240 kilómetros por hora. También fuimos al Ferrari World, es espectacular, están muy buenos los simuladores de autos de Ferrari", recordó Federico.

Una visita a Dubai también se incluyó en las excursiones; una pausa entre tanto contacto científico con colegas de todo el mundo. "Ojalá estos viajes y experiencias sirvan para que más chicos y chicas se interesen por la ciencia. Hay muchas formas de entretenerse y de pasarla bien, solo hay que animarse y dejar que los pensamientos e ideas empiecen a fluir", se entusiasmó Mariel a la hora de buscar más socios para un club que se dedica a pensar pero también a divertirse.