“Los argentinos somos muy reflexivos”

El licenciado en psicología Gabriel Cartañá llegará a Santa Rosa con el encuentro “Las 5 vidas que vivimos ¿azar o decisión?”. El mismo será el sábado 4 de mayo a las 21 horas en el Teatro Español y las entradas se encuentran en la boletería del teatro o por la ticketera teatroespanol.santarosa.gob.ar

 

LA ARENA dialogó con el psicólogo, reconocido popularmente por su actividad en programas televisivos como Bendita, junto al periodista y conductor Beto Casella, o en sus redes sociales como Instagram, donde comparte contenido cotidianamente. “El encuentro plantea preguntas y busca responderlas entre el público y yo, es una propuesta interactiva. La primera pregunta es si el resultado de lo que somos, de lo que cada uno es, es resultado del azar, de la suerte, del destino o es el resultado de nuestras malas o buenas decisiones”, explicó Cartañá. “Si a tu edad actual lo que has construido de vos es el resultado de la suerte o mala suerte que has tenido o si has tomado buenas y malas decisiones. Lo que busco responder en la primera pregunta es eso, si somos el resultado del azar o de las decisiones”.

 

En segundo lugar, este encuentro con el público santarroseño buscará responder en cuál de esas cinco vidas -de las cuales habla el título de esta charla-, nos encontramos. “Si vivimos una vida de 80, 90 años, la cantidad de años que nos toque vivir, vamos a vivir cinco vidas distintas y cada una de esas vidas se diferencia porque tiene necesidades diferentes, objetivos diversos, problemas distintos. La vida que yo llevo hoy a los 54 años es muy distinta a la que tuve a los 8 años; tenía otros deseos, otras necesidades, otros objetivos. Entonces en el encuentro recorremos las cinco vidas para que cada uno que esté en la sala pueda ubicarse en qué vida está, más allá de la edad que tengan, que como la vida no es ordenada a veces vivimos vidas adelantadas o vidas atrasadas de acuerdo a lo que en la vida nos va pasando”, analizó. “Y además nos sirve para ver si la persona que está al lado, no sentada en la butaca de al lado, sino el que está al lado en la vida, el hermano, el primo, la pareja, el hijo, el compañero de trabajo, esa persona que nos acompaña en la vida, está viviendo nuestra misma vida o está viviendo otra, para no exigirle a esa persona que cumpla objetivos que no le corresponden cumplir. Y eso hace que nos llevemos mejor”, aseguró.

 

- Tenés una presencia fuerte en los medios, ¿se fue dando o lo buscaste?

 

- No salí a buscarlo, la vida me dio la oportunidad de que lo encontré y lo tomé. Yo llego a los medios de comunicación a través de un amigo que es Beto Casella, él me lo ofrece como un espacio de pensamiento, un espacio de comunicación para poder llegar a más gente, pero no es que lo busqué, simplemente se me atravesó en la vida y aproveché la oportunidad.

 

- ¿Y con las redes cómo te llevás?

 

- Es un espacio que me divierte, es entretenido. A diferencia de los medios de comunicación, como la radio y la televisión o los medios gráficos, es un lugar en el cual si uno sabe manejarlo bien te pertenece más porque uno lo controla más, uno controla el contenido, el cómo, el cuándo, el dónde, qué subo, cuándo subo. En cambio en los medios de comunicación no. Lo que vaya a salir en esta nota, yo pierdo el poder en cuando corto esta llamada. Vos (por la periodista) vas a elegir, seleccionar qué de lo que nosotros charlemos va a salir publicado, en las redes no, lo decido yo. Las redes es un lugar más cómodo para mí que los medios de comunicación.

 

Lo que sí entiendo es que lo que sucede en las redes no es la realidad, es un recorte de la realidad y lo que te devuelve el público tampoco es la realidad, sea el comentario elogioso de “sos un genio” o el comentario del hater que te dice “sos impresentable”. No hay que darle demasiada importancia a lo que vuelve.

 

- En los últimos años la gente se ha interesado en la psicología a través de personalidades como vos. ¿Por qué creés que se da eso?

 

- Yo creo que hace unos 20 años, antes inclusive a las redes, la gente se empezó a preguntar cosas que por ahí antes no se preguntaba. Antes la gente se casaba, trabajaba, tenía hijos… porque era lo que se esperaba de ellos. Y hace 20 o 30 años la gente empezó a preguntarse “¿quiero casarme?”, “¿quiero tener esta cantidad de hijos?”, “quiero trabajar de esto?”. Se empiezan a preguntar y parte de quien se dedica a intentar responder estas preguntas es la psicología, entonces por decantación los que nos dedicamos a eso empezamos a ser más mirados porque buscamos ayudar a que la gente responda estas preguntas.

 

Y particularmente los argentinos somos muy reflexivos, a diferencia de otras sociedades. Argentina es el país con mayor cantidad de psicólogos per cápita del planeta. La Argentina entiende a la terapia no solamente como un lugar para resolver conflictos o tratar enfermedades mentales sino también como un lugar de crecimiento, de aprendizaje, de desarrollo. En otros países esa concepción de la psicoterapia no existe, y eso nos hace, por lo menos, privilegiados.