Un doble triunfo con gusto a Tandil

En el primer turno, Juan Mónaco venció ayer a la primera raqueta kazaja, Andrey Golubev, por 6-3, 6-0 y 6-4. En el siguiente encuentro, Juan Martín del Potro superó por 6-2, 6-1 y 6-2 a Mikhail Kukushkin. Así, el primer día terminó con la serie 2-0 a favor de Argentina sobre Kazajistán.
Mónaco justificó la elección de Tito Vázquez. Cuando parecía que el candidato a reemplazar a David Nalbandian como singlista era Juan Ignacio Chela, por su destacada actuación en Roland Garros, el capitán se definió por el tandilense, quien, en su partido contra Golubev, no lo defraudó.
Pico demostró un tenis agresivo a lo largo de todo el partido. Intentó siempre tener la iniciativa, pero también supo destacarse cuando el jugador kazajo lo obligó a defenderse. En reiteradas ocasiones jugó puntos largos y, de esa forma, logró complicar a su rival. El euro-asiático no rindió como se esperaba: se lo vio errático y sin poder tomar el control del juego.
En el primer set, el argentino estuvo a punto de sacar ventaja en el inicio. Sin embargo, no pudo aprovechar el doble break point que tuvo a su favor sobre el primer game de saque de su adversario. La revancha llegaría en el sexto juego cuando se quedó con el servicio de Golubev y levantó a todo el estadio.
El segundo parcial fue todo para el de Tandil. Dominó claramente con su saque y no permitió que el kazajo pudiera conservar el suyo. Como en todo el encuentro, Mónaco estuvo sólido con el revés y lastimó mucho con la derecha.
Al comienzo del último set, el local aprovechó el impulso del anterior y pudo obtener el quiebre que conservó durante todo el parcial y le permitió definir el juego.
En conferencia de prensa, Mónaco aseguró que la de ayer fue, tenísticamente, su mejor actuación en la Copa Davis. Reconoció que no fue el mejor partido de su rival pero que, de todas formas, ese bajo rendimiento fue fruto de su presión. "Traté de jugar para que él no juegue bien".

El premio del público.
El resultado del segundo partido fue aún más holgado. Sin embargo, la victoria del Potro no fue tan contundente como la de su coterráneo. Por momentos Kukushkin pareció ofrecer resistencia, pero una vez superada la primera barrera, el camino le quedaba liberado al campeón del US Open en 2009.
La mayor parte del encuentro fue un monólogo del tandilense, que hacía diferencia tanto con la potencia de su saque como de su drive. Incluso las situaciones en las que peligró su servicio -se lo arrebataron en el sexto game del último set- fue más por errores propios que por méritos del rival.
Del Potro quebró desde el inicio del match y se puso 2-0 después de levantar dos puntos para quiebre consecutivos. Una vez destrabado ese segundo juego, el argentino no escondió la diferencia de jerarquía que lo distancia con su adversario.
A comienzos del segundo set, luego de que la Torre de Tandil conservara su saque, se jugó el game más peleado del partido. Si bien desaprovechó numerosos break points, del Potro consiguió quedarse con el servicio del rival y después sacó adelante un juego complicado que le posibilitó seguir tranquilo hasta el cierre.
El último parcial fue una continuación del anterior. Al igual que Mónaco, "Delpo" extendió la racha y consiguió el servicio de Kukushkin en el arranque del parcial. Si bien el número 20 del mundo cedió una vez su saque -por una seguidilla de errores no forzados- nunca estuvo en riesgo su triunfo. Al final, fue 6-2, 6-1 y 6-2.
"Fue un partido difícil. El resultado fue un poco abultado porque los puntos fueron largos y Kukushkin jugó muy bien", dijo el vencedor. "Después del año tan difícil que tuve, creo que el premio de la gente es mucho más que cualquier torneo. Por eso muchas gracias por el apoyo incondicional", remarcó.
El frío de Buenos Aires no se apiadó de la primera jornada, pero fue apaciguado por el calor de la gente que acompañó, una vez más, al equipo argentino. Hoy desde las 11 continuará la serie con el partido entre Juan Ignacio Chela y Eduardo Schwank contra la pareja Evgeny Korolev-Yuri Schukin. Además hoy empieza el resto de las series de cuartos de final con los choques Estados Unidos-España, Alemania-Francia y Suecia-Serbia.