Los caballos campeones se crían en La Pampa

Bartolomé "Lolo" Castagnola es parte de la historia grande del polo mundial. Fue siete veces campeón del Abierto Argentino de Palermo, primero con Ellerstina en dos ocasiones (1997 y 1998) y luego en cinco con La Dolfina (2002, 2005, 2006, 2007 y 2009), equipo que formó junto a su cuñado Adolfo Cambiasso.

Pero en 2011 tomó otro rumbo y fundó su propio equipo-club, La Natividad, en el que le dio rodaje profesional a sus hijos y con el que, ahora como propietario, ya ganó dos veces el torneo más importante del mundo (2021 y 2023).

Una de las patas más importantes de La Natividad, el equipo sensación del momento en el polo mundial, es el campo que lleva ese nombre en Embajador Martini, donde se crían los caballos con los que los mejores polistas de la actualidad confirman que el polo argentino sigue en la elite mundial.

"Tenemos campo en Embajador Martini desde hace más de 20 años; ahí es donde tenemos todos los caballos, donde los criamos a todos", explicó Lolo, en una charla con LA ARENA durante el desarrollo del torneo Copa La Natividad que se realizó este fin de semana en la estancia La Andría de Santa Rosa.

"Nuestros caballos son de acá, de La Pampa. Los criamos acá, después los hacemos domar, luego se hacen de polo y los agarramos nosotros para jugarlos", agregó Castagnola, que también tiene su campo en Cañuelas, su lugar de residencia, donde llevan los caballos para entrenar y también para clínicas y hasta para el desarrollo de una academia de polo. "Pero sí; son de acá", reconfirmó al ser consultado sobre el origen de los caballos de elite con los que La Natividad llegó la temporada pasada a la cima.

En diciembre de 2023, el equipo fundado por Lolo Castagnola ganó el Abierto Argentino de Palermo, el torneo más importante del mundo, de la mano de sus hijos Bartolomé "Barto" Castagnola y Camilo "Jeta" Castagnola, junto a Facundo Pieres y Pablo Mac Donough.

El predio rural La Natividad se encuentra a unos pocos kilómetros al norte de Embajador Martini, a la vera de la ruta nacional 35, y es la base de crianza de la familia Castagnola, confirmando a La Pampa como una tierra formadora de caballos de polo, una tradición que iniciaron los Heguy en Intendente Alvear y que se mantuvo e intensificó con el paso de los años.

De hecho, hace un par de temporadas se exportaron de nuestra provincia casi 200 caballos de polo a Estados Unidos, Gran Bretaña, España y el mundo árabe, donde se juegan los torneos más importantes luego de los que tienen lugar en nuestro país.

"Espectacular".

Lolo Castagnola, a sus 53 años, fue uno de los protagonistas del torneo de polo disputado este fin de semana en La Andría. El certamen ya es una tradición en el inicio de cada temporada, y de la mano del propio Castagnola ha ido creciendo en organización y en calidad de jugadores, para llegar en esta edición 2024 a su máximo nivel.

"Tenemos el campo en Embajador Martini, pero al torneo lo hacemos acá porque tenemos un hotel para estar todos juntos y porque nos es más cómodo, además de tener una cancha muy buena como esta de La Andría", explicó Lolo, casado con Camila Cambiasso, hermana de Adolfo.

Y al referirse a la competencia de este fin de semana la calificó como "espectacular" por el nivel en general. "Está cada vez más lindo; este fue el torneo más alto que se jugó en la historia de Santa Rosa y ojalá que vaya creciendo", remarcó.

El torneo fue de 20 goles de handicap y contó con la presencia de tres de los actuales campeones de Palermo: los hermanos Barto y Jeta Castagnola (ambos con 10 de handicap, el máximo) y Facundo Pieres (volvió a los 10 después de coronarse en el Abierto), que por primera vez vino a La Pampa. También estuvieron Nicolás Pieres (8 goles) y Joaquín Pittaluga (8), otros dos jugadores de la elite mundial.

"La verdad es que pasamos unos días espectaculares. Nos venimos a divertir, pero también a competir y se vio en la cancha", agregó con una sonrisa Lolo, quien se fastidió en un par de oportunidades durante la final, que su equipo (La Zeta) terminó perdiendo ante el de su hijo Jeta (La Nati) por un ajustado 11 a 10.

Por otra parte, Castagnola dijo que "fue un placer total" jugar un torneo con sus hijos, hoy considerados como dos de los mejores polistas del mundo, y explicó que este torneo en tierras pampeanas les sirve "para probar y confirmar caballos de cara a la temporada profesional", además de aportar a "la puesta a punto" de los jugadores.

Finalmente, Castagnola dijo que el polo argentino está hoy "en su mejor nivel", especialmente por la calidad y cantidad de caballos. "El polo está en el mejor nivel, cada vez va creciendo más porque hay muchos buenos jugadores jóvenes y especialmente por los caballos, porque hay más genética y por lo tanto más y mejores caballos", cerró Lolo, que forma ejemplares campeones en su campo de La Pampa.

La Pampa, una pionera.

Los caballos de polo argentinos siempre fueron de jerarquía, pero hasta la década del 80 se basaban especialmente en cruzas y elecciones de los propietarios. Hasta que a fines de los 80, un experto australiano comenzó a utilizar la técnica de "transferencia embrionaria" como reproducción, generando un gran salto de calidad. Y la pionera en Argentina en utilizar esa modalidad fue la familia Heguy, en Intendente Alvear. Años después llegaría la "clonación", y hoy son las dos mayores técnicas de reproducción para la elite del polo mundial.