Domingo 14 de abril 2024

Pericias complican a jardinero

Redacción 15/08/2019 - 01.13.hs

El ex jardinero Armando Ramón Gómez (49) era conocido como "Pilo" por todos -alumnos, personal educativo y religioso- en el instituto religioso para niños sordos e hipoacúsicos Antonio Próvolo en Luján de Cuyo, Mendoza.
El miércoles, Gómez está imputado por seis hechos de abuso sexual y corrupción de menores contra chicos que estudiaban y dormían en el lugar y comparte el banquillo de los acusados junto a los curas Horacio Corbacho y Nicola Corradi en el juicio en la capital provincial.
Gran parte de la atención en el proceso se centra sobre él. No solo por los hechos por los que está acusado, sino también por su situación particular: es hipoacúsico como los alumnos del Instituto y, según su defensora oficial, Alicia Arlotta, no sabe usar lenguaje de señas ni comprende lo que transcurre por estos días a su alrededor.
La semana pasada en la segunda jornada del juicio, el Segundo Tribunal del Fuero Penal Colegiado de la Justicia de Mendoza ordenó que Gómez sea sometido a pericias psiquiátricas y psicológicas. Los resultados se conocieron ayer, con conclusiones contundentes: Gómez está en condiciones de seguir afrontando el juicio en su contra.
Las pericias oficiales fueron desarrolladas por la directora del Departamento de Neurociencia de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Cuyo, María Patricia Gorra. Entre las conclusiones destaca que Gómez conoce y comprende la lengua de señas así como el LSA (lengua de señas argentina) y las utiliza con conocimiento. Estas dos situaciones son claves para la conclusión principal: Gómez queda desmentido por un estudio que considera que comprende lo que ocurre y puede seguir en los debates.
Tanto la querella como la defensa aportaron también sus expertos de control a los exámenes. Por un lado, los peritos de los querellantes concluyeron en coincidencia con el informe de la UNCuyo y firmaron esos resultados. No obstante, los profesionales del Ministerio Público de la Defensa concluyeron en que "el nivel educativo del imputado es de analfabetismo; con un núcleo familiar violento que ha generado complicaciones físicas y psicológicas". En esto se centraron para insistir con su pedido inicial: Gómez no está en condiciones de afrontar el juicio.
El Ministerio Público Fiscal también presentó su informe elaborado por el Cuerpo Médico Forense, el más lapidario de todos, que aseguró que Gómez comprende y maneja la lengua de señas. Además, agregaron que el imputado "realiza ocultamientos burdos" durante la entrevista, "se comunica con otras personas sordas y "maneja la lengua de señas perfectamente cuando él lo desea". Agregaron que se adapta al comportamiento social y se lo observa lúcido y globalmente ambientado.
"No presenta impedimento para comprender y valorar sus acciones, pese a su analfabetismo. Se encuentra en plena capacidad psíquica para afrontar el proceso", concluyen los peritos. Su abogada defensora solicitó que el tribunal cite a los peritos del Cuerpo Médico Forense para que expliquen cómo desarrollaron este informe.
Más allá del informe pendiente sobre Gómez, y que retrasa la definición final de su situación, el tribunal autorizó a que se procediera con las declaraciones de los denunciantes. De esta forma, durante la mañana de ayer se dio inicio a la reproducción de los videos ya filmados a las víctimas durante la investigación.

 

Sordera.
El cura Corradi también adujo problemas de audición. Para que pudiese entender lo que se dice durante las audiencias, se instaló un software que transcribe en tiempo real y en una computadora todo lo que se habla en la sala. Hay además tipeadores que se encargan de controlar lo que se va escribiendo y de corregir en caso de que haya algún error.

 

Cámaras Gesell.
De los 11 denunciantes que tiene la primera causa, se espera que cuatro declaren en estos días: todos lo harán por medio de la reproducción de las cámaras Gesell.
Corradi, Gómez y el también sacerdote Horacio Corbacho (59) suman en total 28 hechos de abusos y corrupción a chicos que estudiaban y dormían en el instituto que funcionó hasta noviembre del 2016 en la calle Boedo al 385.
Gómez permanece detenido en la cárcel provincial de Boulogne Sur Mer desde el comienzo de la investigación . Al momento de referirse a él en las declaraciones, las víctimas lo identifican con "la seña del teléfono en la oreja". El ex jardinero también está imputado por abuso sexual con acceso carnal, así como corrupción de menores por supuestamente obligarlos a ver pornografía. (Infobae.com)

 

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