Tres días de represión en Neuquen

Por tercer día consecutivo, la policía neuquina dispersó ayer con balas de goma y gases lacrimógenos a estatales provinciales que se manifestaron frente al acceso central de la Ciudad Administrativa Ministerial (CAM), en el marco del reclamo sindical por el convenio colectivo de trabajo del sector salud.
Los incidentes se iniciaron al mediodía en el acceso central de la CAM, ubicada a 20 cuadras del centro de la ciudad de Neuquén, donde un grupo de estatales se concentró para pedir que los atiendan funcionarios del Ministerio de Salud, que funciona en esas dependencias.
Efectivos antimotines ubicados dentro y fuera del predio dispersaron a los estatales con balas de goma y gases lacrimógenos hacia los alrededores de las dependencias públicas y afectaron viviendas de un barrio aledaño.
En tanto, el Obispado de Neuquén y la Defensoría del Pueblo de la capital provincial ofrecieron al gobierno y a ATE un espacio de diálogo, "urgidos por la profundización del conflicto y conmovidos por las consecuencias dolorosas que ya afectan gravemente al resto de la sociedad".
El obispo Fernando Croxato y el defensor del Pueblo Ricardo Riva señalaron en una nota que enviaron a ambas partes que "es imprescindible y urgente la búsqueda de soluciones para recuperar la paz social".
Proponen la sede del Obispado para que el lunes próximo, a las 11, mantengan un encuentro representantes del gobierno y de los estatales.
ATE resolvió en una asamblea aceptar la iniciativa y el gobierno provincial no había respondido hasta ayer en la tarde.