En Buenos Aires falleció Roberto “La Vieja” Biaggio

En Buenos Aires, donde residía desde hace años, dejó de existir a los 84 años Roberto Luis Biaggio, reconocido jugador de fútbol que paseó su clase por distintos clubes de esta zona.

Conocido como “La Vieja”, Biaggio fue un típico habilidoso, zurdo y guapo. A Santa Rosa llegó a mediados de la época del ‘60, junto a otros como “Pata” Arín, “Chacho” Maldonado, y Carlos Gallina (que fue a Belgrano), y más tarde vino también Aldo Bafundo. Al llegar ellos desde Buenos Aires conformaron un gran equipo del club de Villa Tomás Mason, pero luego harían historia en otras entidades de la zona.

“La Vieja” en Atlético.

En el caso de “La Vieja” se destacó, y mucho, vistiendo la casaca alba de Atlético Santa Rosa, pero también jugó en otros clubes como Estudiantil de Eduardo Castex, por ejemplo.

Con toda su familia se afincó como un vecino más de la ciudad y vivió durante varios años en el Barrio Río Atuel, junto a su esposa Juana Catalina Agripo. Ambos son los padres de Claudio (El Pampa) y Néstor Biaggio, también futbolistas. El primero con pasado en General Belgrano, All Boys, Peñarol de Montevideo, Danubio y San Lorenzo, entre otros clubes. En el caso de Néstor (El Leoncito) se desempeñó en All Boys, pero también tuvo un paso por la Liga Pampeana.

Toda una familia de futbolistas, los Biaggio llegaron a La Pampa y se quedaron. Además de Roberto lo hicieron sus hermanos Osvaldo (ex jugador de Boca, Vélez y Chacarita, y aquí entrenador de Atlético Santa Rosa y otras entidades), Oscar Manuel (conocido como “Charla”, que vistió algunos años la casaca de All Boys).

Empleado en Casa de Gobierno.

Durante muchos años Roberto trabajó en Casa de Gobierno, desempeñándose como ascensorista --siempre vestido con impecable traje--, en tanto su esposa, Juana, lo hacía en la Legislatura provincial. Con el tiempo –sobre todo impulsados porque uno de sus hijos, Claudio, iniciaba una auspiciosa carrera profesional--, regresaron a vivir a Buenos Aires, y allí ambos siguieron como empleados de la Casa de La Pampa hasta acceder a la jubilación.

En octubre del año anterior perdió a su esposa, y Roberto sintió el golpe. Su salud se fue deteriorando hasta que el pasado jueves se produjo su deceso.