“Que la gente aprenda a hacer su propia medicina”

Un número importante de personas se acercaron en la última semana al primer encuentro del ciclo de talleres para difundir cuestiones vinculadas al proceso de producción de cannabis con fines medicinales, para que quienes necesitan el aceite “aprendan a hacer su propia medicina” y “no caigan en manos de delincuentes”, afirmaron los organizadores.

Rodrigo Catalano, padre de un joven santarroseño de 26 años que utiliza cannabis para afrontar su tratamiento de epilepsia refractaria, y Mario Cabral, cultivador, llevan adelante la charlas que se realizan en la sede del Partido Humanista de la ciudad. Ambos son militantes del autocultivo de cannabis medicinal y están inscriptos en el Registro nacional de personas autorizadas al cultivo controlado con fines medicinales y/o terapéuticos (Reprocann).

“Los talleres de cultivo inicial surgieron para que la gente pueda hacer su propia medicina y no depender de nadie, no caer en manos de delincuentes, esa es la finalidad. La concurrencia de vecinos y vecinas fue muy buena en la primera jornada, ahora vienen los talleres de extracción y otros. Es necesario un buen asesoramiento”, afirmó Catalano en diálogo con LA ARENA.

Gran demanda.

Contó además que “iniciamos los talleres porque hay una gran demanda de aceites y porque la gente lo va a buscar a cualquier lado, con muy malas experiencias y generalmente estafados. Por eso queremos ayudar a que puedan a hacer su propia medicina, también damos algunos tips o preguntas que tienen que hacer a la hora de conseguir aceite en la calle” y agregó: “Al final del curso entregamos plantines para que cada uno empiece a hacer su experiencia con cultivo y plantas genéticamente locales hechas para la medicina”.

Catalano advirtió que “andan dando vueltas aceites de dudosa procedencia o aceites que no tiene componentes activos que necesitan para tratar cada patología, entonces no hay un resultado y ahí empieza una desconfianza. A la gente le damos también una guía sobre todo lo que vamos haciendo en el taller para que tengan material de consulta en esta experiencia, algunos ya estaban cultivando y sacamos dudas y otros son nuevos en el tema, que vinieron con una visión y se fueron con otra”.

En Santa Rosa, el Concejo Deliberante creó por ordenanza el Registro Voluntario para personas usuarias y/o cultivadores de cannabis con fines medicinales que complementa al registro nacional.