Santa Rosa marchó contra los femicidios

Centenares de personas autoconvocadas se movilizaron ayer en Santa Rosa en repudio a los femicidios de Susana Muñoz y Marianela Merino, ocurridos en los últimos tres días en la capital pampeana, a manos de integrantes de las fuerzas de seguridad.

 

La movilización se convocó en la plaza San Martín a las 20 y quienes se hicieron presentes protestaron contra "la inacción e inoperancia estatal que debería trabajar para prevenir los femicidios" en la ciudad.

 

"Dos femicidios en los últimos tres días es la prueba de que el Estado no solo no acompaña, no previene y no da los presupuestos necesarios, no declaran emergencia, sino que los provoca con las armas que ponen a disposición de las fuerzas de seguridad", remarcaron durante la convocatoria.

 

También quienes actuaron de voceras de la marcha destacaron que ambos asesinatos fueron cometidos por agentes de las fuerzas de seguridad estatales, los cuales "cometen 1 de cada 5 femicidios en la Argentina", según afirmaron en un comunicado leído durante el acto.

 

El principal reclamo de las y los presentes es que el Gobierno provincial, en particular el Ministerio de Seguridad, se expida con respecto a la portación de armas por parte de efectivos de la Policía cuando no están en servicio. Asimismo, se reclamó mayor presupuesto para el abordaje de casos de violencia de género, y políticas concretas y rápidas de prevención.

 

Marcha.

 

Las y los manifestantes marcharon por las calles céntricas, para visibilizar el reclamo. Iniciaron la marcha sobre la calle Coronel Gil, y circularon por las calles San Martín, Avellaneda y Lagos, desde donde retornaron a la Municipalidad.

 

Allí se detuvo la manifestación, que ocupaba una cuadra entera, y se prendieron velas frente al edificio municipal para recordar a las mujeres fallecidas en los últimos días. Además, el grupo autoconvocado decidió realizar una nueva convocatoria para el próximo jueves.

 

Se hicieron presentes familiares, amigos y allegados a Marianela Merino, quienes expresaron su dolor y su agradecimiento por la solidaridad de los asistentes con la familia de la joven.

 

Luego, alrededor de las 21.30, un grupo de manifestantes decidió marchar hasta los edificios de la Policia Federal, ubicado en la esquina de Pellegrini y Juan B. Justo, y al de la Policía de La Pampa, en Pellegrini y Escalante. Allí, pegaron carteles y cantaron consignas en reclamo por la inacción de las fuerzas de seguridad.

 

Femicidios

 

En los últimos tres días, dos femicidios seguidos de suicidio conmocionaron a la capital y a la provincia. El pasado viernes, Susana Muñoz (51 años) fue asesinada a manos de quien era su pareja, Antonio Gustavo Boland (44). El hombre, quien formaba parte de la Policía Federal, mató a Muñoz con su arma reglamentaria. Luego, intentó incendiar la casa en la que ambos vivían, en el barrio de Villa Elisa, y se quitó la vida.

 

En el día de ayer, un caso similar volvió a impactar a la sociedad santarroseña. Un hombre, identificado como Elías Horacio Funes, mató a su ex pareja, Marianela Merino. Funes, quien cumplía funciones como sargento en el regimiento 12 de Toay, le efectuó dos disparos a Merino con un fusil FAL y luego se suicidó.

 

El crimen ocurrió alrededor de las 6 de la mañana, en un departamento de la calle Dante Alighieri al 1300, en el que ambos aún convivían. Los vecinos alertaron al personal policial, quienes se acercaron a la escena del crimen. En el lugar también trabajaron los fiscales Marcos Sacco y Máximo Paulucci, y personal de la Agencia de Investigación Científica.

 

El de Merino es el tercer femicidio ocurrido en la capital pampeana en lo que va del año. El primero del que se tuvo registro fue el de Mirta Fetter (39 años), ocurrido el pasado martes 12 de enero. A este le siguieron los de Muñoz y Merino, ocurridos el pasado domingo y ayer, respectivamente.

 

"Es responsable".

 

La marcha que se realizó anoche en la plaza siguió luego hacia los edificios de la Policía Federal y de la Jefatura de la Policía. Con cánticos y tambores se expresaron en contra de la violencia machista. Sobre sus paredes dejaron plasmadas la frase "El Estado es responsable" y huellas de manos con pintura roja.