Un disfraz por una golosina

Niños y niñas disfrazados de payasos diabólicos, zombies, vampiros, brujas y demás personajes terroríficos de películas y series coparon el centro santarroseño para recorrer los distintos negocios con la pregunta: ¿dulce o truco? Las caras de felicidad cuando salían de los locales con sus bolsas llenas de chupetines, caramelos, chocolates para compartir con sus amigos y amigas fueron la excusa perfecta para celebrar Halloween.

 

Aunque no tienen relación con nuestra cultura y tradición, es una realidad que las celebraciones por Halloween, por más "ruido" que generen, toman una mayor dimensión año a año. La pandemia también potenció que todo tipo de festividad se multiplique y, en esta oportunidad, el punto de encuentro de niños y niñas fue la plaza San Martín.

 

A través de las redes sociales se realizó la convocatoria y familias enteras llegaron desde los distintos barrios para celebrar el día. El horario elegido fue después de las 18, ya que es el momento en que los pequeños y pequeñas salen de las escuelas. Muchos llegaron de la mano de sus padres y madres. Había de los más variados disfraces, desde los más terroríficos como brujas, vampiros, zombies, payasos, hasta de superhéroes como el Capitán América y el Hombre Araña, la princesa Blancanieves, y demás personajes de películas y series.

 

Pero sin dudas se destacó un pequeño con su vestimenta de gaucho, para destacar la cultura argentina dentro de un festejo que llegó desde Estados Unidos. Tenía su bombacha de campo, camisa, boina, rebenque y hasta tenía pintado un bigote. Asimismo, no faltó su maquillaje de una araña y un cocodrilo en la cara para darle el tinte terrorífico.

 

Una vez en la plaza San Martín, los niños y niñas en grupos recorrieron los distintos negocios céntricos para pedir golosinas. Muchos de ellos estaban esperándolos y les pidieron que hagan una fila para que nadie se quede sin su caramelo o chupetín. Es más, muchos de los locales estaban ambientados de Halloween con sus maniquíes disfrazados para la ocasión y la presencia de calaveras en las vidrieras.

 

Ayer por la tarde se vivió una fiesta porque, más allá de que la fiesta no sea tradicional de Sudamérica, muchos aprovecharon la ocasión para disfrazarse y encontrarse con sus amigos y amigas. Sobre La Glorieta, las y los participantes corrieron, jugaron con espuma y se tomaron fotografías.

 

Halloween es una de las festividades más populares en los Estados Unidos que se difundió por todo el mundo. Su origen se remonta a Irlanda, en donde durante los últimos días de octubre celebraban el final de la cosecha.