"En La Pampa, las comisarías se convirtieron en cárceles"

El diputado Berhongaray advirtió que en La Pampa las "comisarías se convirtieron en cárceles", ante los cuestionamientos de la ONU al gobierno nacional por "la tortura y el maltrato" en las unidades de detención.
El Comité de las Naciones Unidas contra la Tortura pidió en las últimas horas medidas "urgentes" al gobierno nacional y mostró su preocupación por las denuncias sobre "la práctica recurrente de la tortura y el maltrato" en los centros de detención federales y provinciales.
El diputado Martín Berhongaray (Frepam) opinó sobre el pronunciamiento y afirmó que "la realidad de La Pampa no escapa en mucho de lo que señaló la ONU", que también cuestionó "el alarmante número de casos de femicidios y violencia de género registrados" en Argentina en el último año.
"Hace tiempo vengo cuestionando la superpoblación de internos en las alcaidías de nuestra provincia, y el hecho de que muchas comisarías están convertidas virtualmente en cárceles, lo que retira de sus funciones específicas de prevención de los delitos, a muchos efectivos que pasan a cuidar detenidos, una tarea propia del personal penitenciario", dijo.
Agregó que "las comisarías y alcaidías no cuentan con la preparación y los requerimientos que exige un programa de necesidades carcelarias. Tarde o temprano quienes están detenidas van a recuperar su libertad, por eso es muy importante que se les apliquen tratamientos de resocialización específicos que no se practican actualmente".
En La Pampa, según Berhongaray, se están "afectando los derechos humanos de muchos detenidos y del personal que los custodia, porque el encierro en condiciones anormales, con hacinamiento, sin régimen de progresividad de la pena y sin un abordaje multidisciplinario que tenga en cuenta cada perfil criminológico, fomenta los conflictos y las situaciones de violencia muchas de las cuales terminan con resultados fatales".
"Hay que entender que no va a disminuir la delincuencia por el solo hecho de privar de la libertad a un condenado si no existe un objetivo y un trabajo de rehabilitación. Seguridad no significa sólo apartar de la sociedad a quien la dañó y puede dañarla de nuevo. Seguridad significa también educarlo para que los errores no se vuelvan a cometer", explicó.
En la provincia, la problemática carcelaria volvió a la escena en marzo pasado, cuando cuatro policías quedaron detenidos por no accionar ante una pelea -cuya filmación trascendió públicamente- entre presos de la Alcaidía de General Pico, que ellos permitían, cuando debían intervenir.
Ese video se sumó a otra situación irregular ocurrida en una cárcel también de la ciudad norteña, donde los internos denunciaron en un video que los policías les dejaban ingresar a las celdas alcohol, gaseosas y pastillas tranquilizantes, a cambio de 300 pesos. Ambas cuestiones fueron judicializadas.

Santa Rosa.
Por otro lado, el diputado Berhongaray se refirió al "ataque" verbal que recibió el intendente Leandro Altolaguirre de los concejales del PJ por la situación que atraviesa la ciudad y la falta de respuesta que advirtieron los vecinos de la calle Santa Cruz, en las últimas horas.
"Deberían ser más humildes y reconocer que la situación en la que se encuentra la ciudad es producto de muchas administraciones anteriores que gestionaron los recursos de los vecinos de manera despreocupada e irresponsable. Y que en un año no se puede resolver la desidia de 30 años", explicó.
Así, Berhongaray salió en defensa de Altolaguirre, después que los concejales justicialistas le pidieron al jefe comunal que "empiece a gestionar para la gente".
"Pero no es tan fácil pedirles que se hagan cargo del pasado si hoy se los escucha a muchos criticando el 'dos por uno' de la Corte Suprema, pero son los mismos que defendieron y aplaudieron los indultos de Menem o que acompañaron la autoaminstía y el perdón a los genocidas que proponía Luder en la campaña del 83", cerró el diputado.