Otro jueves sin sesión legislativa

Otra vez no hay sesión en la Cámara de Diputados, escenario que se prolonga desde hace varias semanas en razón de que los legisladores se hayan abocados -en su mayoría- a la campaña electoral.
La situación -de ver que se hacen sesiones esporádicas-, que se ha repetido desde antes de las internas partidarias del 5 de julio, parece que se prolongará hasta que en octubre se realicen las elecciones nacionales -y aún más tarde si se diera la circunstancia de un ballottage presidencial-, con lo que las reuniones en el recinto serán casi una curiosidad en el contexto legislativo.
Se especulaba con que hoy podría haberse realizado una sesión con un mínimo orden del día -aunque en la semana no se reunió ninguna comisión parlamentaria-, y que se iba a considerar cómo se debía producir la designación del nuevo legislador, que debiera reemplazar a Pedro Etchalús.
Hubo algunas idas y vueltas pero al final los diputados cortaron por lo sano: tampoco habrá sesión hoy.

Recién el 13 de agosto.
Una rápida mirada al recinto permitía ver ayer que el lugar se encontraba en las mismas condiciones que el miércoles 8 de julio, cuando los legisladores se sentaron en sus bancas para -entre otras cosas- homenajear al Tuta Cuello. Algunos papeles sobre las bancas, y el silencio propio de una jornada -una más- en que no habrá sesión. La próxima, si todo es más o menos como se imagina, se realizará recién el jueves 13 de agosto, luego que se hayan llevado a cabo las PASO, el domingo anterior.
En algún momento -argumentando que hay un acuerdo tácito, aunque enfrente lo nieguen- el PJ impuso su mayoría para determinar que las sesiones se hagan cada 15 días. Eso permitiría -aseguraban- el trabajo en las comisiones y llegar a cada una de ellas con un orden del día lo suficientemente importante. Lo cierto es que, en estas horas, el trabajo en comisión también brilla por su ausencia.

Notorias ausencias.
Caminar por los pasillos legislativos es, hoy en día, encontrarse con unos pocos empleados, y la presencia de algún que otro diputado que va casi "de visita", porque obviamente tampoco es que avanzan con la tarea legislativa. En el Frepam hay notorias ausencias, pero la misma situación se presenta en el bloque mayoritario del PJ, y en bancadas como Pueblo Nuevo o Comunidad Organizada.
Es verdad que muchos están ocupados con las respectivas campañas electorales, pero también es cierto que no parece un ejemplo edificante que no consigan hacerse de un mínimo tiempo para concurrir a la que, al cabo, es su tarea, aquella con la que aseguran sentirse "honrados" de haber sido elegidos para realizar. ¿Alguien se puede imaginar a cualquier mortal faltando reiteradamente a su trabajo, con la excusa que fuere? ¿Cuál sería en ese caso su destino? La deducción es fácil, cae de maduro.