«Aumento que va por fuera del decreto»

En la mañana de ayer, algunos automovilistas que hacían fila para cargar combustible en una YPF del centro santarroseño se vieron sorprendidos a raíz de un cese momentáneo de la carga por un ajuste en el precio de surtidor. Pese a que el sábado el gobierno nacional publicó un decreto que postergó los aumentos hasta abril, «en este caso se trata de una suba en el marco del Impuesto al Dióxido de Carbono (IDC)», explicó a LA ARENA Miguel Angel Ripa, titular de la Cámara de Expendedores de Combustibles de La Pampa (Cecla).
«Hoy (por ayer) se aplicó un aumento que ronda el 0,5% por el nuevo IDC que dispuso el gobierno. Es una suba que va por afuera del decreto que posterga hasta abril», aclaró Ripa al tiempo que explicó que se trata de «entre 8 y 10 centavos de diferencia con el precio anterior por cada litro de nafta».
En el decreto publicado durante el fin de semana, el gobierno postergó por tercera vez el aumento del Impuesto a los Combustibles Líquidos hasta el 31 de marzo, momento en que se esperan subas de alrededor del 6% por litro de nafta y del 4% en el caso del gasoil, por lo que el precio en surtidor subiría $3,20 y $2,05 respectivamente.

Precio controlado.
Respecto de si el precio del combustible se encuentra atrasado, Ripa sostuvo que si bien «el precio no ha sido actualizado, está controlado». Explicó que «el petróleo ha bajado mundialmente y eso hace que se deba reconsiderar el precio del combustible, no sé si aumentarlo o bajarlo», pero que «la otra cuestión es la incidencia de los costos internos». En ese sentido, argumentó: «Hace falta, en principio, una actualización pero que no es del volumen que se pensaba antes con un crudo a $65 ó $70, pero no se puede determinar cuál es el atraso».
Al referirse al consumo de nafta en verano, Ripa aseguró: «El consumo se mantuvo, es más, tuvo un pequeño crecimiento». Ese incremento interanual se debe «a la disponibilidad de dinero de la gente y el movimiento interno relacionado al turismo».
Sin embargo, se registró una caída del gasoil. «Nuestra zona fue afectada por un problema climático importante y no hay tareas puntuales en el agro que demanden mucho combustible», cerró.