Dorila camina hacia un futuro más sustentable

Terminaron las vacaciones y en Dorila los alumnos de la Escuela Nº 49, donde funciona a la mañana el secundario y por la tarde el ciclo primario, se preparan para volver a las aulas. Luego de una temporada con restricciones que obligó a disfrutar la colonia de vacaciones con protocolos y burbujas, el regreso a clases permitirá intensificar el proyecto municipal para la separación de residuos urbanos. «Nuestros chicos y chicas resultan fundamentales en esta cuestión. Lanzamos el proyecto en conjunto con la escuela durante la pandemia y los vecinos ya iniciaron la separación, lo que nos permitió implementar la recolección por separado y comenzar a transformar nuestro basural a cielo abierto», comentó la intendenta Natalia Hollman.
En las afueras del pueblo, el viejo depósito de basura ya muestra los cambios. «Queremos dejar de quemar y enterrar basura para pasar a una etapa más sustentable, en consonancia con el Programa de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos (Girsu) que proyecta la provincia. Ya iniciamos el proceso de compostaje y construimos separaciones para vidrio, plástico, cartón y metales. Hicimos convenios para que retiren la chatarra, vendemos el vidrio y estamos acumulando las botellas plásticas para utilizarlas en el parque recreativo que planificamos sobre los terrenos del ferrocarril», agregó.
Parque nuevo y cloacas.
Este nuevo espacio que menciona Hollman se sumará al tradicional Complejo Pino (llamado así en memoria de José Gribodo, entrañable personaje de la historia local fallecido en 1965) donde se desarrolló la colonia de vacaciones y que cuenta con dos piletas de natación, una cancha de padel, un quincho y un gran espacio verde. «Sobre un terreno de cuatro hectáreas junto a las vías estamos proyectando un complejo al aire libre, con cancha de fútbol, playón polideportivo, pileta con vestuarios, parque de juegos infantiles, buena forestación y espacios de recreación» contó. El personal de la Administración Provincial del Agua realizó la perforación y ya colocaron la bomba que permitirá regar «por goteo y por aspersión» los árboles nuevos que en breve plantarán.
Dorila es una localidad con casi mil habitantes y pretende seguir creciendo hacia un modelo más sustentable. «Renovamos la posta sanitaria para incorporar especialidades y ya sumamos un odontólogo y un psicólogo que vienen desde General Pico». Y el municipio sueña ahora una obra tan ambiciosa como necesaria: un sistema cloacal que elimine los vetustos pozos ciegos «Antes de seguir asfaltando queremos gestionar las cloacas mediante un convenio con la nación», anunció.
En cuanto a viviendas, un par de días antes de empezar la cuarentena «se entregaron cinco casas y ahora estamos iniciando la construcción de otras tres». Y luego de que la empresa Camuzzi aprobara una ampliación del tendido de gas natural pudieron habilitar loteos nuevos «con unas 160 parcelas privadas» que permitirán ampliar la oferta habitacional.
Luego de un año muy singular, cuando la pandemia postergó todos los planes, Dorila se asoma ahora a un nuevo panorama, orientado a promover un modelo de vida más sustentable, a tono con los tiempos que vivimos.