El STJ le pasó la pelota a Bensusán

El número de alojados a principios de mes era de 90 personas, una cantidad que sobrepasa la capacidad de ese lugar. Algo similar ocurre en muchas comisarías, que además no están preparadas para albergar detenidos.
JUAN JOSE REYES - En una reciente reunión de acuerdo, el Superior Tribunal de Justicia (STJ) tomó conocimiento de la nota remitida por el comisario a cargo de la Alcaldía de la Unidad Regional 1 en Santa Rosa, Norberto Héctor Corbo Encinas, solicitando ayuda urgente a la justicia pampeana "por exceso de capacidad de alojamiento de detenidos". La dependencia carcelaria capitalina "cuenta en mayo con 90 detenidos presentes", número que en diciembre era de 102 personas, es decir una sobrepoblación carcelaria inédita.
Ante el pedido, el máximo organismo jurisdiccional pampeano tomó cartas en el asunto y le sugirió al titular de la Alcaidía que eleve "un informe pormenorizado al Ministro de Gobierno y Justicia" Daniel Pablo Bensusán, para que el organismo oficial de la provincia solucione la complicada situación carcelaria en la capital pampeana.
No sorprende que la alcaidía santarroseña esté abarrotada de presos al igual que la de General Pico y de otras comisarías por falta de espacios físicos para albergar detenidos. La proyección a futuro es "alarmante y pesimista" expresó el observatorio de la Defensa Pública en una conferencia en la UNLPam. Para la Dirección General de Administración (DGA) del STJ en Acuerdo del 9 de mayo, el informe redactado por el Alcalde decía que eran 90, pero han sido más.
Corbo Encinas instó al STJ a una urgente solución a la cantidad de presos en la cárcel ubicada sobre la calle Liberato Rosas de Santa Rosa. Afirmó que "siendo sus mayores problemas el exceso de capacidad de internos y la falta de disponibilidad de alojamiento para aquellas personas que son detenidas y se encuentran en etapa de prisión preventiva". Ante ello el tribunal supremo le sugirió al jefe policial "concurrir por la vía jerárquica correspondiente y poner en conocimiento al Ministerio de Gobierno y Justicia sobre lo acontecido mediante nota".

Impactante crecimiento.
Meses atrás Alejandro Osio, defensor de Ejecución en la provincia, reveló en la casa de altos estudios de la UNLPam que "en los últimos 6 meses las prisiones preventivas efectivas crecieron 34 por ciento casi en forma paralela al discurso oficial de mano dura y el reclamo concreto del Ejecutivo provincial para que los detenidos por distintos delitos no entren por una puerta y salgan por otra".
Anticipaba allí la problemática de la Alcaidía 1 y de otros calabozos por el exceso de alojamiento de detenidos. Algunos dirán que hay más policías en la calle. Otros, que trabajan mejor. Que subieron su vocación represiva. O que están más activos.
Lo cierto es que hay una consecuencia inocultable: cada vez más gente ingresa a los presidios y todo se complica más cuando los detenidos con prisión preventiva y sin sentencia firme también crecen. "Está sobrepoblado y al borde del hacinamiento" afirmó. El STJ ejerce la superintendencia sobre los organismos del Poder Judicial pampeano, pero no así el carcelario y menos sobre condiciones higiénico poblacionales.
Allí se sustentó la misiva dirigida al titular de la Alcaidía I para que "por vía jerárquica sea el ministerio de Gobierno el que proponga la solución" descomprimiendo la situación. Es extraña la no intervención de la Secretaría de Derechos Humanos y ONGs provinciales ante la precaria situación de estos recintos en los organismos correspondientes para revertir un sistema que no está capacitado para alojar más gente.