Joven condenado a 16 años por golpear y violar a su ex pareja

La justicia condenó a un hombre de 25 años a la pena de 16 años de prisión al ser imputado de lesiones graves calificadas por el vínculo infringidas a su ex pareja. Aunque al momento de fijar la sanción el juez Daniel Alfredo Sáez Zamora consideró como atenuantes -a favor del imputado- su relativa juventud que permitiría «considerar que todavía internalizar pautas que permitan una correcta inserción en la sociedad», y además que tiene trabajo estable como albañil; consideró un agravante que fue «un ataque de gran violencia a una mujer que se encontraba sola y en un lugar que le permitió actuar con total discrecionalidad».
El magistrado consideró al atacante -que perpetró el hecho en la tarde del 24 de septiembre de 2020- como autor de los delitos de lesiones graves calificadas por el vínculo -por la condición de ex pareja-, y en concurso real con abuso sexual con acceso carnal. Los hechos fueron enmarcados en la ley 26485 de Protección Integral a las Mujeres y al imputado se le mantuvo la prisión preventiva hasta que el fallo quede firme.
Dijo Sáez Zamora que el nivel de violencia fue «desproporcionado en función de las condiciones físicas de la víctima, la falta de oposición que ejerció y el motivo que lo llevó al ataque, con una visión objetivizada de la mujer y con una finalidad de control y dominio sobre la víctima».

Los hechos.
El juez pudo reconstruir que aquel día el acusado llegó a la vivienda de un familiar «con la excusa de buscar un casco, pero era para ver si la víctima estaba en ese lugar». En ese momento existió una discusión y el imputado se fue. Poco después regresó junto a otros dos familiares y un amigo con el objetivo de retirar a su ex pareja de la casa. En ese momento después de sacarla de debajo de una cama comenzó a golpearla y patearla. El hombre que estaba con la mujer logró que el agresor se retirara nuevamente.
Pero iba a volver después cuando la damnificada estaba sola. La mujer cerró la puerta con llave y la trabó con una garrafa y el cabo de un hacha. Pero aún así, mientras dormía, el agresor volvió a entrar rompiendo el vidrio de una ventana. Otra vez la golpeó y le produjo «numerosos cortes con una botella que estaba rota», se detalla en la sentencia.
Aunque la mujer trató de escapar el hombre la llevó hasta su domicilio donde su hermana bañó a la damnificada, le limpió las heridas y le cambió la ropa. En ese momento, el victimario volvió a pegarle y enseguida la trasladó hasta la parte de la vivienda que ellos habitaban y abusó de ella.
Posteriormente, ya de madrugada, la trasladó al hospital junto a su cuñado.

«Gran violencia».
En sus alegatos el fiscal Cristian Alejandro Casais había pedido una pena de 18 años de prisión, y la querella (Secretaría de la Mujer), representada por Silvana Andrea Abraham y Flavia Rubin, adhirió a esa postura.
En tanto el defensor oficial, Juan José Hermúa, no discutió las lesiones sufridas por la víctima, ya que el propio acusado reconoció la autoría; pero sí negó el abuso sexual.