La URIII aseguró que no recibieron denuncias

El jefe de la Unidad Regional III, Marcelo Alarcón Palomeque, informó que por el momento no se ha recibido ninguna denuncia contra el accionar de un efectivo que presta funciones en el destacamento de la localidad de General Campos. Tampoco, aclaró, se ha receptado una presentación en la comisaría de Alpachiri, de la que depende el destacamento de Campos.
En un breve contacto mantenido con LA ARENA el comisario general sólo se limitó a indicar que no existe ninguna actuación administrativa que se haya iniciado por alguna conducta protagonizada por el uniformado que trabaja en ese pueblo.
Por otra parte, fuentes consultadas por este diario indicaron que ante el Ministerio Público Fiscal de General Acha, sólo se tramita una causa penal iniciada a partir de las acusaciones cruzadas que tuvo como protagonistas al encargado del puesto policial de General Campos, oficial principal Eduardo Elizondo y a un efectivo que presta funciones en la comisaría de Alpachiri.

Acusaciones.
Hace unos días la policía de Campos inició actuaciones por supuesto atentado y resistencia a la autoridad, y desde Jefatura de Policía se dispuso la retención del arma de fuego del empleado policial, a los fines preventivos, y se labraron actuaciones administrativas. La mujer del aprehendido dio otra versión de los hechos.
En esa oportunidad Elizondo se constituyó en el domicilio de una mujer, a los fines de notificarla sobre las actuaciones iniciadas en su contra por haber incumplido el aislamiento social.
Mientras procuraba cumplir con ese procedimiento, intervino su esposo que trabaja en la comisaría de Alpachiri, quien se opuso a que la mujer firmara la notificación. Ante esta situación un agente comenzó a filmar con su celular lo que estaba ocurriendo, lo que alteró al hombre. Todo empeoró, y debieron reducirlo y lo trasladaron hacia la dependencia. Poco después fue notificado en libertad a disposición de la Fiscalía.

Precedente.
Por su parte, la mujer del agente implicado, dijo que esta situación era el corolario de viejas diferencias entre Elizondo y su esposo. «Hace tres años discutieron por cuestiones de servicio y lo mandó a Alpachiri», reveló a través de las redes sociales. A su vez, negó haber incumplido con la cuarentena, debido a que tenía autorización extendida por el municipio para poder hacer delivery de churros; como así también, que su esposo haya atentado u ofrecido resistencia a la autoridad. Sólo intervino para impedir que le hablaran mal a su esposa.
Más allá de la causa penal que se tramita por ante la Fiscalía achense, no existen otras investigaciones que estén abiertas y tengan como imputado al policía de Campos.
De todas formas recientemente la abogada Aldana Prost aseguró que el policía ha recibido al menos cinco denuncias vinculadas a su desempeño como policía. Habló de actuaciones que se tramitan ante la Fiscalía de Investigaciones Administrativas, y la Fiscalía de esta ciudad.