Piden dar clases particulares

Como consecuencia de tantas semanas de cuarentena por la pandemia de coronavirus, unos 35 docentes de música de Santa Rosa presentaron una nota ante el Gobierno de La Pampa, pidiendo se les dé la posibilidad de dar clases particulares. La nota fue entregada hace unos 15 días, pero aún no han tenido respuesta alguna. En el escrito, los profesores de música insisten en la necesidad inmediata de poder trabajar, ya que muchos de ellos no están recibiendo ningún tipo de aporte económico. «Venimos a pedir comprensión, solidaridad, sentido común y apoyo desde las acciones de gobierno, para que podamos volver a lo nuestro, nada más -ni nada menos- que a trabajar para vivir», explicaron en la nota los firmantes.
Los docentes solicitan ser habilitados para la circulación en la vía pública, y así poder ejercer la tarea de esta profesión. «En principio hablamos de alumnos individuales, excepcionalmente podría ser más de uno a la vez, en tanto el espacio físico permita mantener la distancia preventiva y con el protocolo que determinen las autoridades de la salud. Cada cual lo haría -en general- en sus habituales y respectivos espacios físicos. Alguno, será en la propia residencia, o en la del alumno, otros en local determinado o a determinar», detallaron. «El que enseñe instrumento de viento o canto, deberá procurar algún tipo de mampara o nylon de separación, ventilación, etcétera; el de cuerdas, piano o percusión deberá afianzar otros aspectos; en todo lo que sea necesario seremos permeables, accesibles y siempre acataremos las indicaciones que surjan a posteriori, a partir del análisis sanitario de rigor».

Economía y salud.
Los músicos justificaron su pedido dado su elevado grado de vulnerabilidad económica. «Sabido es que nuestra actividad no se caracteriza por un alto nivel de cachet, ni de facturación. Quienes alternábamos con algún eventual show público o privado, todo eso hoy se halla vedado. Lo mismo para quienes complementábamos con actividad de talleres educativos paraestatales, por los cuales a su vez, pendíamos de un contrato a término, sin la protección de la legislación laboral vigente, carentes de aportes, obra social, aguinaldo, y también desprovistos de todo beneficio social reconocidos por la seguridad social», detallaron.
Por otra parte, los docentes justificaron el pedido desde una mirada que reposa sobre la importancia de valorizar al ser humano como individuo. «De este modo vemos a las personas (en el papel de alumnos) contar con una herramienta de estimulación de la fina motricidad, de naturaleza terapéutica, tanto para su psique en aspectos cognitivos y estabilizadores emocionales, como también en la generación de endorfinas, mejorando los niveles inmunológicos, el ánimo, y replican sobre el bienestar y la felicidad en su entorno».