Donde aparece lo que era menos esperable

Señor Director:
La noticia es de orden nacional y hace saber que la AFIP ha desbaratado una maniobra de jubilados y monotributistas argentinos.
El detalle de la información agrega que se trata de un grupo de jubilados y monotributistas argentinos que operaba entre Neuquén y Chile. Estas personas pueden no estar radicadas en Neuquén, sino que se ubicarían en la provincia por su proximidad con Chile a través de pasos practicables. La operativa consistía en pasar a Chile, simular allí la adquisición de bienes y servicios y aducir un saldo en pesos chilenos que cambiarían por dólares, con los cuales reingresaban al país.
Parece que la operatoria les resultaba fácil, aunque el rédito de cada viaje fuese reducido. Por este motivo, al parecer, multiplicaron los viajes, hasta llegar a la desmesura de 46 idas y venidas por mes. En el exceso hallaron la penitencia, porque atrajeron la atención de recaudadores muy atentos desde la crisis de enero pasado (cuando se intentó un golpe de mercado que obligó a acelerar la suba del dólar oficial y aumentar el control). Cuando fueron aprehendidos habían conseguido entrar unos 200 mil dólares, que pueden ser transformados en 2 millones de pesos. Ahora están sujetos a la acción judicial, pero ya la AFIP les practicó ajustes impositivos e inactivó el CUIT momentáneamente.
La noticia llamó la atención porque existe una idea diferente del jubilado y del monotributista. Sucede que la tentación es un demonio que, como el de Don Juan de Zorrilla, recorre "toda la escala social".
Aclaro esta última referencia para quienes no han leído a Zorrilla. En la escena final de su disputa con Luis Mejía, acerca de quien tenía más muertos por su mano y más mujeres seducidas, en la que gana Juan Tenorio, éste dice, con respecto a las seducidas: "Desde una princesa real /a la hija de un pescador /ha recorrido mi amor /toda la escala social".

Casino
El cobrador de una empresa que vende cosméticos en La Pampa, cumplida su faena en varios pueblos de nuestra provincia se tentó con el casino. Entró, apostó y la fortuna le hizo pito catalán. Las cámaras de ese antro lo muestran desempeñándose como alguien desesperado, que no sabe a qué atenerse. Con todo, se controla y sale con algún resto en su cartera de cobranzas. Toma su vehículo y viaja hacia la provincia de Buenos Aires. En el camino concluye que lo mejor es denunciar que ha sido asaltado, pero astutamente entiende que no podría explicar que los ladrones le dejaran parte del dinero. Lo pone en una bolsa de nylon, lo esconde en una alcantarilla y luego va a la policía de Trenque Lauquen y retorna su mala suerte. Lo mandan a La Pampa, pues el hecho que menciona se habría producido en tal jurisdicción. La policía pampeana no cree en su relato y el hombre, derrotado, confiesa la verdad.
El lector puede idear una moraleja.

¡Nena!
Tiene 12 años. Fue a la escuela y en uno de los recreos necesitó mostrar a compañeros eso que había traído en su bolso. Una pistola 32.
Algún alumno avisó a los docentes y los docentes a la policía. Se supo luego que la pistola estaba en su casa y su padre se dijo dueño... pero el arma tiene el número borrado.
Sucedió en Florencio Varela. Pudo pasar en cualquier parte.

Cajero
Del Banco de La Pampa. Se desempeñaba en la sucursal de Tres Arroyos y se tentó. No se sabe si por primera vez. Las cuentas con reducido movimiento tienen ese no sé qué con poder para desnudar apariencias y derrotar escrúpulos. Parece que han desaparecido unos tres millones de pesos. No es moco de pavo. Ni es el primer caso.
Alguien con acceso a una de esas cuentas inactivas (dinero de una herencia) quiso retirar una suma en el banco Pampa de General Acha y así quedó en descubierto la maniobra delictuosa.
El que se cubrió fue el cajero, que está desaparecido de "los lugares que suele frecuentar", según la manida frase. Hago esta nota cuando lo están buscando.
Jotavé