Mosquitos: una medida apresurada

ERNESTO VIGLIZZO
No deja de sorprenderme la recomendación que la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud de la Provincia de La Pampa ha hecho a los municipios: no fumigar frente a la explosiva eclosión de mosquitos que abruma a gran parte del territorio provincial. Se recurre a dos argumentos: 1) que no tenemos todavía circulación de dengue en la provincia (y por lo tanto podemos convivir con esta molesta plaga), y 2) que el uso sostenido de un insecticida para combatirlo puede generar en ella cepas resistentes al plaguicida.
Me temo que es una recomendación temeraria. Frente a la amenaza del coronavirus, lo que menos necesitamos es que otra enfermedad (real o potencial) transmitida por mosquitos se agregue al listado de preocupaciones sanitarias de los pampeanos. Nada garantiza que el dengue u otras enfermedades tropicales avancen sobre nuestra provincia frente al cambio climático. Así como la medicina tiene una batería de antibióticos alternativos para atacar a los gérmenes que enferman a los humanos y los animales, también existe una batería de insecticidas que se pueden utilizar cuando uno de ellos generó resistencia en una plaga de insectos. Si una cepa de mosquitos adquirió resistencia, se pueden utilizar insecticidas alternativos para combatirlos. Lo que no podemos es dormirnos en la complacencia de la inacción. Parece apresurada y poco meditada esta recomendación frente al problema que se puede generar.