Bianca Montiel, una de las mejores atletas del país

Su primera carrera la disputó en 2012, cuando tenía 12 años y aceptó una invitación de su papá. Salió segunda y ese día se le impregnó la adrenalina de la competencia. Empezó a entrenar de manera formal y el atletismo se impuso como la prioridad. Horas de sacrificio con un frío demoledor o un calor de desierto en la pista que está a la vera de la laguna. Siempre lista para ganarle otra milésima más al tiempo.
"Para mí saber que con sacrificio se puede lograr todo lo que uno quiere es lo que me impulsa todos los días. Acá sabés que si le ponés ganas después vas a tener la satisfacción de lograr cosas, y eso es lo que me está pasando; más allá del gran respaldo de mi entrenador y, más que nada, de mi familia", dice Bianca a un costado de la pista de atletismo del parque "Don Tomás" mientras se cambia para otra jornada de entrenamiento

Cursa 4to. año en la Escuela Normal de Santa Rosa. Tiene 15 años pero sus días no son como los de cualquier adolescente. Si no está en la pista es porque se fue de viaje o porque anda subida a algún podio. Siempre corriendo. Rápido.
"Estas últimas semanas fueron a full. Empecé en el Nacional de Juveniles, en Rosario, donde fui tercera compitiendo con chicas de 18 y 19 años. Después llegaron los Juegos Epade, en Santa Rosa, y gané cuatro medallas de oro y dos de plata. En la Copa de Cadetes salí campeona nacional en 1.200 metros y subcampeona en 2.000 metros, de ahí viajé a Chaco y salí doble campeona nacional, en .1200 y 2.000 metros", enumera Bianca.

Siguieron los Juegos de la Araucanía en Neuquén, donde se consagró campeona binacional en 1.500 y 3.000 metros, y segunda en 800. "Llegué el domingo a la mañana y a la noche viajé a Mar del Plata para los Juegos Evita", recordó. Para no perder la costumbre, fue campeona en los 800 y los 2.000 metros. "A los poquitos días viajé a Santa Fe para el Nacional de menores, y fui campeona en 800 y subcampeona en 1.500". Casillero completo.
Decir que Bianca es la mejor del país a su edad no es una exageración sino una realidad. "Al menos en las dos distancias que son mi especialidad soy la mejor en mi categoría. Y en Menores soy la mejor en los 800 metros", afirma con la naturalidad que le da la convicción de saber lo que busca.

Dueña de un físico diminuto, Bianca tuvo su primer contacto con el deporte a través de la gimnasia. Se destacaba, pero su desempeño dependía de la apreciación subjetiva de los jueces. Y eso no la convenció. Entonces su papá Javier Montiel, junto a su mamá Carina Molina, le insistieron con el atletismo para que ratificara en la pista lo rápido que corría en las clases de Educación Física de la escuela.
"Quería hacer un deporte donde mi esfuerzo valiera y no como en la gimnasia que depende de jueces. A mí me gusta mucho competir y medirme conmigo misma, superarme y tratar de bajar mis propios tiempos. Además es como que corriendo me puedo descargar, me impulsa a hacer un mejor entrenamiento cada día y ver cómo me supero".

La elección de Bianca implica sacrificio. Y dejar de lado las cosas que la mayoría, a su edad, hacen con rutina adolescente. "Es sacrificado, para hacer atletismo un poco te tiene que gustar sufrir", admite entre sonrisas. "Siempre cuesta aunque una vez que te acostumbrás a entrenar ya tenés el hábito. No hay nada que no me guste de este deporte porque si no, no lo haría. Muchas veces mis compañeros o amigos están en la laguna paseando y yo transpirando con un calor tremendo, pero es lo que a mí me gusta, no lo cambio por nada".
Si el viernes hay una salida nocturna, ella descansa o está de viaje. Si todos duermen hasta tarde, ella madruga y va a correr junto a su entrenador Raúl Risso. Pero Bianca disfruta el presente y se ilusiona con su futuro.
"Sueño con hacer grandes cosas. Mi objetivo es llegar a los Juegos Olímpicos 2020; voy a tener la edad justa para una carrera deportiva y ese es mi gran sueño. El atletismo es mi forma de vida y lo que quiero hacer siempre, por eso no me pesa dejar de lado algunas cosas para poder alcanzar lo que más me motiva".

Bianca también colecciona resultados a nivel internacional porque en 2014 viajó al Sudamericano de Aracajú, en Brasil, y clasificó tercera en los 800 metros. Este es su último año como cadete porque en 2016 pasará a la categoría menores, y allí seguramente la exigencia será mayor, como a ella le gusta.
"Ya competí muchas veces con chicas más grandes y me ha ido bien, así que en ese sentido estoy tranquila porque sé que si sigo entrenándome con todas las ganas, los resultados van a seguir".
¿El atletismo tiene muchos seguidores o cuesta que se acerquen?
"Me parece que faltaría difundir un poco más el atletismo, que se acerquen y lo conozcan. Intentamos traer chicos pero no los podemos retener porque es muy sacrificado y no todos están dispuestos a hacer el esfuerzo, pero yo les digo que vale la pena".
Educación Física o Fisioterapeuta son carreras que le interesarían para estudiar una vez que haya finalizado el secundario. Bianca no quiere apurarse, pero ya está corriendo, y cada vez más rápido.