El Boxing Club, cuyo modelo se pensó para el Megaestadio

Recorrida.
En ocasión de disputarse los recientes Juegos de la Araucanía "Santa Cruz 2013", un periodista de LA CHUECA tuvo la posibilidad de recorrer las instalaciones del Boxing Club, una obra de envergadura para la capital santacruceña. Muchos de los pampeanos que concurrieron a la competencia quedaron asombrados por la magnitud del gimnasio y rápidamente surgían las preguntas sobre cuándo estará terminado el Megaestadio.
Enzo Calisto, encargado del área de mantenimiento del gimnasio, fue el guía. Y a cada paso uno se asombra e intenta buscar comparación con la construcción pampeana. Al ser una institución privada y al no contar con los fondos necesarios para llevar adelante semejante obra, el gobierno santacruceño se hizo cargo de los gastos y el Boxing Club le cedió unos terrenos, que luego la provincia no utilizó y volvieron a manos de la entidad.
"La obra se comenzó en el año 1999, aunque primero se tuvo que rellenar con tierra y piedras el terreno, porque era una zona de vertientes. Incluso, cuando empezaron a hacer las primeras perforaciones a tres metros ya teníamos agua; por eso las columnas más grandes están a unos 20 metros de profundidad", recordó Calisto, quien aseguró que el techo del gimnasio se colocó durante los meses de septiembre y octubre "los más ventosos en Río Gallegos".
Tras repasar un poco de historia, comenzó la recorrida. La primera parada fue en el gimnasio principal (57 por 27 metros), con capacidad para unas 3.500 personas (2.570 butacas más dos tribunas rebatibles). "Si bien se estima que pueden entrar unos cinco mil espectadores, el día de mayor concurrencia fue en un acto de Néstor Kirchner, donde había 11 mil personas", contó.
La dimensión del gimnasio permite que se desarrollen en simultáneo cuatro actividades deportivas (por ejemplo fútbol, hockey, básquet y voley). La obra incluyó la construcción de un escenario de 11 por 7 metros, que puede extenderse tres metros.
Luego de transitar por un largo pasillo, donde se encuentran los vestuarios (para hombres, mujeres, niños, niñas, discapacitados y árbitros), se llega al gimnasio alternativo (20 por 30 metros). Uno recorre unos metros más y se encuentra con una cancha de pelota a paleta, una de squash y un salón para la práctica de gimnasia artística (todos con sus respectivos vestuarios). A esto se suma un quincho y un salón de fiestas, con capacidad para 300 personas.
Del otro lado del gimnasio principal, se instaló una sala donde se desarrollan actividades ritmicas, un lugar para la práctica de karate. Con el fin de darle utilidad a todos los sectores que quedaban libres, más que nada en el primer piso, se fueron diagramando distintos salones: un gimnasio de aparatos, otro de musculatura, y uno de boxeo. Es decir no quedaron sitios "muertos".
El mantenimiento del Boxing Club de Río Gallegos requiere entre 10 y 15 mil pesos por mes, aunque para Calisto "ahora se está necesitando un poco más". El mayor aporte viene de la mano de los recitales, ya que el alquiler "más barato" ronda entre los 30 y los 40 mil pesos.
Un gimnasio que se pensó y construyó en el tiempo previsto; mientras tanto, el Megaestadio espera pacientemente que algún día se le pueda colocar el techo. El año próximo comienza nuevamente la rotación de las sedes para los Juegos de la Araucanía y será el turno de Temuco (región de la Araucanía). Luego, pasarán por Neuquén, Bío Bío, Chubut, Magallanes y le tocaría a La Pampa (2019). Quizás doce años después, el polideportivo pampeano pueda ser inaugurado.