Weigandt ganó otra medalla

El santarroseño Nicolás Weigandt (19 años) ganó la medalla de bronce en el segundo día de competencia del Campeonato Nacional Absoluto Open y Junior de natación, que se está desarrollando en la pileta olímpica de Parque Roca, Buenos Aires.

Weigandt, que en la jornada del miércoles había ganado la medalla de oro en los 200 combinados, ayer fue tercero con un tiempo de 4m39s39. El vencedor de la prueba resultó el bonaerense Marc D'Aurizio, que estableció 4m33s37, mientras que segundo fue el marplatense Martín Materano, con 4m33s55.

Anoche, Weigandt se mostró disconforme con su desempeño. En diálogo con LA CHUECA, el campeón se mostró triste, hizo un autocrítica y aseguró que para la carrera de hoy, de 200 metros espalda, buscará disfrutar del momento para luego regresar a Santa Rosa y reencontrase con su familia.

“Fue una preparación muy larga para este torneo. Desde febrero que estoy entrenando, y para que tengas una idea, alrededor de 10 semanas estuve cumpliendo una intensa rutina en la pileta del Cenard, lejos de mi familia, haciendo un gran sacrificio. Entonces es lógico que me siente mal, no me fue bien. Pensaba hacer un mejor tiempo”, indicó.

Desde hace años, el deportista del club All Boys viene destacándose. Ganó un sinnúmero de medallas en torneos provinciales y nacionales; como así también aportó valiosas medallas para La Pampa cada vez que lo tocó disputar los Juegos Binacionales de la Araucanía.

Con los sentimientos a flor de piel, con el dolor de no haber podido alcanzar su objetivo, Weigandt señaló: “Hice un proceso de preparación muy bueno, muy importante. Pero no tuve un buen día, sé en lo que fallé por eso estoy muy dolido. La prueba de 400 metros combinados es muy exigente, hay que estar al 100 por ciento concentrado en cada uno de los estilos, pero fallé en pecho. Sé que son cosas que pueden pasar”.

“Hoy estoy muy dolido conmigo mismo. Y la verdad que no sé que será de mi futuro. Quizás es muy pronto tomar una decisión, por eso voy a esperar. Sé que tengo que tranquilizarme pensando en los 200 metros de espalda de mañana (por hoy), una prueba en la que no soy un favorito, pero que siempre la disfruté”.