Asalto, persecución y choque
Redacción 18/05/2011 - 04.26.hs
Una tentativa de robo terminó con dos personas hospitalizadas. Todo comenzó cuando un motociclista intentó asaltar a mano armada a un joven que se trasladaba en su auto. Este huyó y chocó contra un Corsa.
Un robo fallido pudo terminar con nefastas consecuencias para tres personas que protagonizaron un terrible accidente vial. Un joven que se trasladaba en un Volkswagen Voyage fue apuntado con un arma de fuego por un motociclista en las inmediaciones del barrio Matadero. El conductor del automóvil se dio a la fuga, pero fue perseguido por el asaltante, cuyo rostro ocultaba detrás de un casco. El joven se desplazó a gran velocidad por la avenida Circunvalación rumbo oeste por el barrio Colonia Escalante, seguido de cerca por el motochorro, pero en la intersección de esa avenida y San Roque pasó un semáforo en rojo e impactó contra un Chevrolet Corsa.
El hecho se registró a las 19.45. El Volkswagen era conducido por el hijo de un conocido comisario retirado de esta ciudad y había hecho una parada en el barrio Matadero para buscar a una mujer, que según trascendió de las fuentes policiales de la Seccional Primera, ejercería la prostitución. Las dos personas recorrieron un par de cuadras por el barrio cuando fueron abordados por el ladrón, que circulaba en una motocicleta de gran porte, según dijeron posteriormente los involucrados.
En un primer lugar, fuentes confidenciales informaron que el asaltante se trataría de un asociado de la trabajadora de la calle, (sería el "fiolo") pero la policía desmintió esa versión.
Mientras el automóvil estaba detenido en un semáforo, el motociclista se puso a la par y desenfundó un revólver del interior de su campera. Instintivamente, el conductor del Voyage puso primera, arrancó a toda velocidad y circuló unas siete cuadras aproximadamente hasta que impactó contra el Corsa que cruzaba San Roque. Este último vehículo era conducido por Juan Kloster, quien se dirigía hacia el estacionamiento de la empresa de transporte Grupo Plaza, ubicado a metros del lugar del accidente, para prepararse para un viaje que debía realizar en calidad de chofer.
Al ver lo que había provocado, el asaltante depuso su proceder y se dio a la fuga. Por el momento los oficiales desconocen su identidad.
El Chevrolet recibió el impacto justo en la mitad del lado izquierdo por parte del Voyage, cuyo frente quedó prácticamente destrozado. Según las pericias de los investigadores, el VW había pasado en rojo a gran velocidad con el fin de perder al asaltante.
Una ambulancia del Servicio de Emergencias Médicas acudió al lugar y trasladó rápidamente a Kloster al hospital Lucio Molas, mientras que la trabajadora de la calle de origen paraguayo quedó atrapada entre los hierros retorcidos del Volkswagen y se necesitó del trabajo de los agentes policiales para sacarla del interior. Sin embargo, y pese a que ella también fue llevada al mismo nosocomio con urgencia, ninguno de los accidentados recibió heridas de consideración.
En tanto, en el lugar del siniestro, el joven conductor del Volkswagen se negó a ser asistido por los paramédicos, pero luego sufrió un ataque de nervios y se desmayó, aunque no recibió herida alguna.
Un robo fallido pudo terminar con nefastas consecuencias para tres personas que protagonizaron un terrible accidente vial. Un joven que se trasladaba en un Volkswagen Voyage fue apuntado con un arma de fuego por un motociclista en las inmediaciones del barrio Matadero. El conductor del automóvil se dio a la fuga, pero fue perseguido por el asaltante, cuyo rostro ocultaba detrás de un casco. El joven se desplazó a gran velocidad por la avenida Circunvalación rumbo oeste por el barrio Colonia Escalante, seguido de cerca por el motochorro, pero en la intersección de esa avenida y San Roque pasó un semáforo en rojo e impactó contra un Chevrolet Corsa.
El hecho se registró a las 19.45. El Volkswagen era conducido por el hijo de un conocido comisario retirado de esta ciudad y había hecho una parada en el barrio Matadero para buscar a una mujer, que según trascendió de las fuentes policiales de la Seccional Primera, ejercería la prostitución. Las dos personas recorrieron un par de cuadras por el barrio cuando fueron abordados por el ladrón, que circulaba en una motocicleta de gran porte, según dijeron posteriormente los involucrados.
En un primer lugar, fuentes confidenciales informaron que el asaltante se trataría de un asociado de la trabajadora de la calle, (sería el "fiolo") pero la policía desmintió esa versión.
Mientras el automóvil estaba detenido en un semáforo, el motociclista se puso a la par y desenfundó un revólver del interior de su campera. Instintivamente, el conductor del Voyage puso primera, arrancó a toda velocidad y circuló unas siete cuadras aproximadamente hasta que impactó contra el Corsa que cruzaba San Roque. Este último vehículo era conducido por Juan Kloster, quien se dirigía hacia el estacionamiento de la empresa de transporte Grupo Plaza, ubicado a metros del lugar del accidente, para prepararse para un viaje que debía realizar en calidad de chofer.
Al ver lo que había provocado, el asaltante depuso su proceder y se dio a la fuga. Por el momento los oficiales desconocen su identidad.
El Chevrolet recibió el impacto justo en la mitad del lado izquierdo por parte del Voyage, cuyo frente quedó prácticamente destrozado. Según las pericias de los investigadores, el VW había pasado en rojo a gran velocidad con el fin de perder al asaltante.
Una ambulancia del Servicio de Emergencias Médicas acudió al lugar y trasladó rápidamente a Kloster al hospital Lucio Molas, mientras que la trabajadora de la calle de origen paraguayo quedó atrapada entre los hierros retorcidos del Volkswagen y se necesitó del trabajo de los agentes policiales para sacarla del interior. Sin embargo, y pese a que ella también fue llevada al mismo nosocomio con urgencia, ninguno de los accidentados recibió heridas de consideración.
En tanto, en el lugar del siniestro, el joven conductor del Volkswagen se negó a ser asistido por los paramédicos, pero luego sufrió un ataque de nervios y se desmayó, aunque no recibió herida alguna.
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